Tras la caída de Fujimori, la corrupción en Perú tomó formas distintas

Ahora cuatro expresidentes entre los que se encontraba Alan García -quien murió tras dispararse en la cabeza- están bajo investigación por haber recibido sobornos para campañas electorales por parte de la constructora brasileña Odebrecht.

El expresidente de Perú Alan García falleció este miércoles, horas después de ser ingresado en un hospital en “estado crítico” tras dispararse en la cabeza cuando iba a ser detenido por la policía en el marco del caso Odebrecht, que tiene bajo investigación a cuatro expresidentes del país sudamericano.

En entrevista para Aristegui En Vivo, el ex procurador anticorrupción de Perú, Julio Arbizu, explicó que tras la caída de la “organización criminal” que operaba durante el gobierno deAlberto Fujimori -quien cumple una condena de 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad, robo y corrupción- la corrupción en Perú tomó distintas formas.

Ahora cuatro expresidentes entre los que se encontraba Alan García –Pedro Pablo Kuczynski, Ollanta Humala y Alejandro Toledo– están bajo investigación por haber recibido sobornos para campañas electorales por parte de la constructora brasileña Odebrecht.

“Cuando se derrota ese gran castillo de corrupción, la organización criminal de Fujimori-Montesinos en el 2000 lo que ocurre es que se relajan los controles y la corrupción toma otra forma: ya no hablamos de otra organización criminal sino de varias, pequeñas organizaciones que se nutren de las secuelas de la alta corrupción que en algún momento campeó en el Perú“, explicó Arbizu.

García, que gobernó durante dos periodos entre 1985 a 1990 y de 2006 a 2011, tenía prohibido salir del país desde noviembre, mientras era investigado por colusión, lavado de dinero y tráfico de influencias ligadas a la concesión a Odebrecht de la construcción de la línea 1 del metro de Lima.

Para el ex procurador anticorrupción eran contundentes los cargos con los que la Fiscalía había solicitado la detención preliminar de García, un hecho que se logró gracias al equipo especial con el que cuenta el sistema de justicia peruano desde hace varios años y que se ha dedicado exclusivamente a la investigación del caso Odebrecht.

“Hubo en el pasado una situación permanente de impunidad, hablo particularmente de García quien había librado antes una condena por una prescripción de la acción penal, no pudo ser procesado (…) tiene una vieja pulsión de eludir la acción de la justicia“, dijo.

Más tarde, Arbizu escribió en su cuenta de Twitter: “No se celebra una tragedia, pero tampoco se convierte en mártir a quien no lo es”.

García ingresó en el Hospital Casimiro Ulloa tras haberse disparado a sí mismo cuando la policía estaba llegando a su casa con la orden de detención preliminar durante 10 días.

Por sus vínculos con Odebrecht, los expresidentes Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski han pisado la cárcel, mientras que Alejandro Toledo es prófugo de la justicia desde 2017 y se ha ordenado un proceso de extradición a Estados Unidos para que sea procesado en Perú.

También la hija del expresidente Alberto Fujimori, Keiko Fujimori, se encuentra sometida a la justicia por el llamado caso Lava Jato y sus consecuencias en Perú.

“La historia del Perú es compleja en términos de la corrupción estatal y de a relación de los funcionarios públicos con determinados intereses privados”, apuntó Arbizu.

ALD/aristeguinoticias

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