El nuevo impuesto del 3% afectará a las empresas digitales con ingresos de más de 750 millones de euros (845 millones de dólares) a nivel mundial y 25 millones de euros (28 millones de dólares) en Francia.
El proyecto de ley aprobado llega un día después de que la Casa Blanca ordenara una investigación sobre el plan de Francia para imponer impuestos a las grandes compañías de internet, advirtiendo que el impuesto podría discriminar a las compañías estadounidenses. La medida significa que Estados Unidos podría terminar imponiendo aranceles como represalia a los productos franceses.
Poco después de que se aprobara el proyecto de ley, el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, habló con los periodistas y reaccionó ante la amenaza de represalia de Estados Unidos.
“Hay otras maneras entre los aliados para resolver nuestras diferencias, no hay necesidad de amenazas”, dijo Le Maire.
El plan del Reino Unido, anunciado en octubre, aplicaría un impuesto del 2% a los servicios digitales vendidos por compañías rentables con ingresos globales anuales de al menos 500 millones de libras esterlinas (US$ 627 millones). Se implementaría en abril de 2020.
Los ministros de Finanzas del G20 apoyaron ampliamente, el mes pasado, un plan desarrollado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos para revisar las normas de impuestos corporativos globales y abordar los desafíos en la tributación de las empresas digitales.
La propuesta está diseñada pensando en las empresas digitales, pero también tiene implicaciones importantes para las empresas multinacionales tradicionales.
El representante de Comercio de Estados Unidos instó a los países a esperar “un acuerdo multilateral para abordar los desafíos al sistema tributario internacional que plantea una economía global cada vez más digitalizada”.
BBC
