El Departamento de Justicia lleva a cabo una investigación sobre abusos sexuales en federaciones deportivas olímpicas, así como malas prácticas financieras.
Aseguran que se están examinando posibles fallos en el sistema de las organizaciones deportivas olímpicas nacionales a la hora de responder a las “señales de un abuso infantil generalizado”.
La Federación de Gimnasia de EEUU se sumió en 2016 en una crisis sin precedentes cuando estalló el escándalo de abuso sexual sistemático en el que participó el excoordinador médico del equipo nacional Larry Nassar y que la obligó a declararse en bancarrota para reorganizarse. Fue condenado a más de 300 años por abusos.
La directora ejecutiva de la Federación de Gimnasia de Estados Unidos, Kerry Perry, que asumió su cargo en diciembre de 2017, ya se planteó como una de sus prioridades de su mandato erradicar por completo una cultura en la que las señales de advertencia de abuso no fueron atendidas durante años.
Además de la Federación de Gimnasia, otras federaciones como las de taekwondo, natación y voleibol han estado envueltas en escándalos sobre cómo se manejaron las acusaciones sobre abuso sexual en el pasado.
Apuntan que en las investigaciones están involucradas la unidad de lavado de dinero y de explotación infantil del Departamento de Justicia y que, desde principios de año, han citado a varios responsables de distintas organizaciones, entre ellas el Comité Olímpico estadounidense.
Los investigadores están tratando de determinar si la dinámica de poder en el funcionamiento del sistema olímpico estadounidense ha favorecido la explotación de deportistas jóvenes, entre ellos menores de edad. Antiguos responsables de las federaciones de gimnasia y taekwondo, entre otras, están en el punto de mira.
ALD/Efe