La empresa digitalGoogle debe cancelar mil millones de euros equivalente a 1.100 millones de dólares a las autoridades francesas para resolver la investigación por fraude fiscal que inició hace cuatro años.
Los investigadores franceses han intentado establecer si Google, cuya sede central europea se encuentra en Dublín, no canceló sus cuotas al estado para evitar declarar partes de sus actividades en el país.
Según el acuerdo establecido comprende una multa de 500 millones de euros más impuestos adicionales de 465 millones de euros.
El pago combinado de impuestos es inferior a los 1.600 millones de euros que el ministerio de finanzas había estado buscando luego de que las oficinas de la compañía en París fueron allanadas en 2016.
El ministro de Presupuesto, Gerald Darmanin, informó que el acuerdo buscará «un precedente legal así como se están manteniendo conversaciones con varias empresas»
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