Cuba estaría revendiendo parte del petróleo de Venezuela y combustible que le envía Venezuela en condiciones favorables, dijo Carlos Vecchio, enviado en Estados Unidos del líder opositor venezolano Juan Guaidó, reconocido como presidente del país por más de 50 naciones.
Antilavadodedinero / Infobae
Vecchio, que funge como embajador en Washington, agregó que el régimen de Nicolás Maduro no estaba consiguiendo nada a cambio de los envíos a Cuba, de acuerdo con un informe del portal de noticias Infobae, publicado el jueves.
“No hay nada que la dictadura de Cuba nos pueda dar que compense la cantidad de petróleo y productos que le enviamos”, dijo el representante de Guaidó, en una conferencia online con periodistas.
Y agregó: “Cuba no necesita esa cantidad de petróleo (…) probablemente, parte de eso será revendido”.
El régimen de Maduro envió 14,1 millones de barriles de crudo y productos refinados a Cuba entre enero y junio, según datos de Refinitiv Eikon y documentos internos de la petrolera estatal Petróleos de Venezuela PDVSA.
Las exportaciones de petróleo de Venezuela se han visto afectadas por las sanciones de Estados Unidos que pretenden presionar a Maduro para que renunciara.
Washington ha sancionado a los buques que transportan petróleo venezolano a Cuba, argumentando que a cambio La Habana apoya a Caracas con seguridad e inteligencia para ayudar a apuntalar a Maduro.
Ni PDVSA ni el Ministerio de Petróleo de Venezuela se pronunciaron al respecto.
Por otro lado, trabajadores y retirados de la petrolera estatal venezolana PDVSA protestaron el martes en al menos seis estados por mejores beneficios, amenazando con abandonar el trabajo en áreas clave de una producción que ya se encuentra en sus niveles más bajos en casi 80 años.
Cientos de trabajadores de diferentes áreas protestaban en los estados de Monagas, Anzoátegui, Sucre, Zulia, Carabobo y Falcón, entre otros, chocando con las fuerzas de seguridad en algunas áreas, informaron líderes sindicales de las divisiones de PDVSA occidental y oriental.
La mala gestión de Venezuela de su industria petrolera y las sanciones de EE.UU. han llevado la producción de crudo a mínimos históricos, y en las refinerías se lucha por estabilizar la producción de gasolina en torno a 80.000 barriles por día.
Además, por las menores ventas externas, los tanques de almacenamiento están casi llenos, obligando a PDVSA a reducir la producción porque no tendría dónde guardar crudo,