La Policía de Tailandia anunció este jueves su decisión de reabrir la investigación contra Vorayuth Yoovidhya, heredero de la compañía Red Bull, por el atropello mortal en Bangkok de un policía en 2012, tras semanas de polémica sobre el trato de favor dispensado por la justicia al multimillonario.
AntilavadoDeDinero / EFE
Las autoridades investigarán a Vorayuth por posibles delitos de consumo de drogas y conducción temeraria -cargo que no prescribe hasta 2027-, confirmó el comisario asistente de la Policía Nacional Jaruwat Wisaya en una rueda de prensa.
A finales de julio se conoció que la fiscalía había archivado el caso un mes antes a petición de la Policía después de que prescribieran varios delitos y hubiera recibido nuevos testimonios en favor de rico heredero.
Tras la enorme indignación que la decisión causó en Tailandia, la fiscalía solicitó la semana pasada a la Policía que volviera a examinar el caso y alegó que dos pruebas claves no fueron incluidas en la resolución anterior.
Las autoridades crearon un nuevo panel investigador, que ha concluido este jueves con la decisión de reabrir la investigación ante los análisis de sangre de Vorayuth que revelan el consumo de cocaína y pruebas de la conducción a alta velocidad con su coche por el centro de Bangkok.
Jaruwat también apuntó que se ha abierto una investigación para dirimir la existencia de delitos en la actuación de al menos 14 policías implicados en el informe que solicitó la retirada de cargos y quienes además recibirán sanciones disciplinarias.
El 3 de septiembre de 2012, Vorayuth conducía un Ferrari negro por las calles de Bangkok en torno las cinco de la madrugada cuando chocó contra la moto de Wichean Klinprasert, un policía de 47 años al que arrastró hasta 100 metros antes de darse a la fuga.
Según el informe del profesor Sathon Wijarnwanarak, de la Universidad de Chulalongkorn, el coche circulaba a unos 177 kilómetros por hora en una zona céntrica de la capital tailandesa.
Wichean murió en el acto y un rastro de aceite llevó a los policías a la lujosa residencia de los Yoovidhya, que al principio declararon que el coche había sido conducido por el asistente y chófer de Vorayuth.
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El heredero, de 35 años, reconoció finalmente que él conducía el coche deportivo y dio positivo en consumo de cocaína y en la prueba de alcoholemia, aunque la policía concluyó que el acusado bebió después del accidente debido al estrés y la droga procedía de un tratamiento en el dentista.
Las autoridades se comprometieron a llevar a Vorayuth ante la justicia, pero este faltó a hasta ocho citaciones judiciales, y finalmen