osé Mauricio Hernández Gasca, alias el “Tomate”, uno de los líderes más sanguinarios de la Unión Tepito, se ha esfumado después de haber sido detenido el 12 de junio de 2019, en la alcaldía Azcapotzalco, Ciudad de México.
Antilavadodedinero / Apuntoenlinea
El presunto cabecilla del grupo criminal quedó en libertad, tras el fallo de la fiscalía capitalina, que no pudo comprobar la culpabilidad del “Tomate”, en el delito de homicidio.
El pasado viernes, Hernández Gasca dejó la celda en la que estuvo más de un año. Según los reportes, el único testigo que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) tenía en contra del Tomate, ya no se presentó a señalarlo como el sujeto al que vio participar en el múltiple homicidio de la plaza Garibaldi, en septiembre de 2018.
La carpeta judicial 012/765/2018, obtenida por el periodista Carlos Jiménez, detalla que, en 2018, la fiscalía obtuvo el testimonio de un hombre que dijo llamarse José Alberto Hernández Villegas. Supuestamente éste aseguró ante el Ministerio Público que observó que el “Tomate” había participado en el crimen.
En su declaración incluyó que lo vio bajar de un auto modelo Versa y acercarse a su víctima para disparar. El supuesto testigo aseguró que no sabía cómo se llamaba, pero lo describió físicamente y aseguró que lo apodaban Tomate de La Unión.
Ese testimonio fue el que permitió a las autoridades obtener la orden de aprehensión en su contra. Sin embargo, cuando se solicitó que el Ministerio Público reprodujera la prueba ante el juez; es decir, presentara al testigo que tenía para que reafirmara sus dichos, ya no lo encontraron.
Agentes de la Policía de Investigación (PDI) fueron a buscarlo en la dirección que supuestamente dejó como su domicilio, pero resultó ser un predio abandonado. Los investigadores lo rastrearon en distintas bases de datos, pero en ninguna apareció. En sus datos generales, se detallaba que el hombre era franelero o limpiaparabrisas, pero la realidad es que en esa zona nadie lo ubicó. Ninguno de los datos resultó real. Al final, no encontraron al testigo.
Jiménez asegura que en los pasillos de la fiscalía sospechan que la FGJCDMX “inventó” un testigo para acusar al presunto criminal.
El día de la captura del “Tomate”, éste acudió a visitar a su novia, detenida en la Fiscalía de Homicidios de la capital de México.
Se había dejado crecer el cabello y estaba más delgado. Creyó que nadie lo reconocería, pero un sujeto que estaba ahí arrestado lo identificó y lo delató. Entonces lo capturaron.
El “Tomate” quedó encerrado en prisión. Sus abogados buscaron pruebas para defenderlo, y la Fiscalía hizo lo mismo para acusarlo. Sin embargo, el órgano no halló pruebas en su contra, y lo peor, el único testigo que lo identificaba, ya no regresó a declarar.
La detención del José Mauricio Hernández Gasca fue ampliamente difundida por las autoridades de la Ciudad de México. En el expediente se hacía hincapié en que se trataba de unos de los principales líderes y extorsionadores de la Unión Tepito.