El expresidente paraguayo Horacio Cartes (2013-2018), del gobernante Partido Colorado, fue llamado a declarar el próximo viernes ante la comisión del Congreso que investiga las actividades del cambista brasileño Darío Messer en Paraguay, investigado por lavado de dinero.
Los legisladores que integran la comisión decidieron hoy convocar a Cartes después de que su nombre fuera citado por la exfuncionaria de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) Raquel Cuevas durante su declaración.
El titular de la comisión, el senador colorado Rodolfo Friedmann, anunció hoy en su cuenta de Twitter la convocatoria de Cartes, que según los medios locales tenía una amistad con Messer.
Tras las comparecencias de la mañana, Friedmann comentó a los medios que Cuevas señaló al final de su declaración “que el señor Horacio Cartes figura dentro del reporte final del informe (de la Seprelad sobre Messer) de junio de 2017”.
“Dijo que hace parte del informe y no creo que haya sido con respecto a un partido de fútbol, estamos hablando de lavado de dinero”, comentó el senador.
Friedmann señaló que dicho informe tiene que estar tanto en la Fiscalía como en la Seprelad, al que solicitarán el documento para no “entrar dentro de lo que es la investigación del Ministerio Público”.
Durante la mañana, la comisión interrogó a Cuevas y al exjefe de Gabinete de Cartes (2013-2018) Juan Carlos López Moreira, quien confirmó que conocía a Messer.
Sin embargo, Moreira declaró que nunca habló sobre Messer con el exmandatario y tampoco cuando se conoció el caso, por respeto ya que el cambista era amigo del expresidente.
Messer se encuentra prófugo y buscado en Brasil por operaciones millonarias de lavado de dinero que habrían movido 1.600 millones de dólares en 52 países.
Además está imputado y declarado en rebeldía en Paraguay.
La Fiscalía paraguaya sostiene que Messer, su hijo y un primo de Cartes habrían realizado operaciones irregulares en Paraguay por un monto de 40 millones de dólares y a través de tres empresas de las que eran accionistas.
ALD/EFE