Al 95.9% de actas procesadas por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), todo indica que Keiko Fujimori sería la candidata presidencial que competirá con Pedro Castillo en una segunda vuelta electoral. Más de un millón de peruanos la eligieron como representante, a pesar de que la Fiscalía pidió 30 años de prisión contra ella y otras 6 personas por presunto lavado dinero de Odebrecht para su campaña política de 2011.
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En este contexto electoral, el fiscal Domingo Pérez pidió al Ministerio Público que tome las medidas necesarias para garantizar que cesen los actos de violencia cometidos por Keiko Fujimori contra él y su familia.
En marzo de este 2021, el integrante del Equipo Especial Lava Jato anunció que culminó su investigación y solicitó una audiencia de control para que el juez evalúe las pruebas que recabó contra Keiko Fujimori y otros 39 implicados. Pidió 30 años de prisión contra la lideresa de Fuerza Popular y su cúpula integrada por Vicente Silva Checa, Pier Figari, Ana Herz, Jaime Yoshiyama, José Chlimper y Adriana Tarazona.
Domingo Pérez advirtió que esta audiencia podría tardar años en programarse debido a maniobras legales de las defensas de los acusados y la alta carga procesal en el Poder Judicial.
«No quiero ser pesimista, pero tengo acusaciones desde el año 2019 planteadas. En el caso Metro de Lima se presentó la acusación en junio de 2019. Hasta la fecha no hemos iniciado control porque hay un mecanismo dilatorio de parte de los abogados defensores para ir recusando a los jueces», explicó en el programa Panorama.
En ese sentido, cabe hacerse la pregunta: ¿qué sucedería con la audiencia de control y posible audiencia oral si Keiko Fujimori se convierte en la próxima presidenta del Perú?
El abogado constitucionalista Omar Cairo respondió que, según el artículo 117 de la Constitución, el presidente (a) no podría ser procesado desde el 28 de julio de 2021 hasta el 29 de julio de 2026. «El juicio contra los demás implicados sí continuaría», aseguró.
Para el abogado penalista Carlos Caro, la audiencia de control se programaría recién en 2023, pero el juez solo podría decidir si hay suficientes pruebas contra los implicados, mas no contra Keiko Fujimori.
Si considera los fundamentos recabados, el juez programaría una audiencia oral, donde se escucharían las pruebas de los presuntos delitos (crimen organizado, lavado de activos, obstrucción a la justicia y falsa declaración en procedimiento administrativo) y se decidiría si habría una condena o una absolución para los implicados.
Keiko Fujimori seguiría el mismo proceso, pero cuando termine un supuesto mandato.
«En caso de que los implicados fueran condenados, ella (Keiko Fujimori) también tendría que ir a juicio y eventualmente podría ser absuelta o condenada», aclaró Caro.
En tanto, en el caso hipotético de que gane las Elecciones 2021, solo podrán mencionarla en las audiencias contra las personas implicadas en el caso de lavado de activos.
«Sí podrían mencionarla en el juicio porque, según el fiscal, existe una organización criminal liderada por ella. Pueden referirla, puede aparecer en las pruebas, pero no se puede decidir su situación. Es como el caso de Alan García, murió, pero se le sigue mencionando porque habría estado implicado», precisó el letrado.
