El Buró Federal de Investigaciones en El Paso (FBI) advirtió a la comunidad sobre las estafas de criptomonedas que se han visto durante la pandemia del Covid-19 y que han causado perdidas en miles de texanos.
Antilavadodedinero / diario
De acuerdo con el agente especial de supervisión cibernética, Paul Davis, los estafadores aprovechan el aumento del miedo y la incertidumbre para robar el dinero de las personas y lavarlo a través del complejo ecosistema de criptomonedas.
“Personas de todas las edades, incluidos los ancianos, están siendo víctimas de delincuentes a través de esquemas de fraude relacionados con las criptomonedas”, dijo el agente.
“Los desarrollos en la tecnología de las criptomonedas y un número cada vez mayor de empresas que la aceptan como pago han impulsado la creciente popularidad y accesibilidad de las criptomonedas”, añadió.
Davis dijo que muchos crímenes financieros tradicionales y esquemas de lavado de dinero ahora se orquestan a través de quioscos de criptomonedas.
El agente explicó que la mayoría de los fraudes ocurren con intentos de chantaje con correos electrónicos o cartas amenazantes en los que los estafadores afirman tener acceso a su información personal o conocimiento de sus “secretos” y exigen el pago en Bitcoin para evitar la divulgación de esta información.
También aseguró que los estafadores se hacen pasar por empleadores y piden una “donación” de fondos en su propia cuenta bancaria y que los deposite en un quiosco de cifrado.
“La llamada “donación” es probablemente dinero robado a otros. Su aceptación y transferencia del dinero robado se considera actividad de mula de dinero ilegal y transmisión de dinero potencialmente sin licencia”, dijo el agente.
Asimismo, dijo que otras formas de estafa son las que se somete a pagar por tratamientos o equipos inexistentes.
“Se sabe que los estafadores atraen a los clientes que aceptan pagos en criptomonedas por productos que en realidad no existen”, dice el FBI.
El FBI asegura que además los delincuentes suelen lanzar inversiones fraudulentas en una criptomoneda “nueva” y en desarrollo, como una oferta inicial de monedas (ICO) u otro vehículo de inversión para tomar el dinero de una víctima.
“Por lo general, estas estafas involucran escenarios que parecen “demasiado buenos para ser verdad”, lo que ofrece grandes retornos monetarios por una pequeña inversión a corto plazo.
“La realidad es que los estafadores roban el dinero de la inversión para uso personal y utilizan las complejidades de la criptomoneda para ocultar el verdadero destino de los fondos robados”, se lee en un comunicado.