La Oficina de Seguridad del Internauta ha detectado un peligroso aumento de una de las estafas que ahora mismo está protagonizando el día a día en las redes sociales. Se trata de un nuevo método de sustracción y recolección de información llamado ‘estafa de la maleta retenida’ o ‘fraude de la maleta’. En esta nueva modalidad de timo, los ciberdelincuentes se hacen pasar por un familiar o un amigo cercano que se encuentra en una situación desesperada, y todo a través de redes sociales tan típicas como Twitter, Instagram, Telegram, Messenger, Facebook o incluso algo tan usual como WhatsApp.
Antilavado de Dinero / COPE.
Esa tesitura tan complicada consiste en que ese amigo cercano o familiar, que teóricamente se encontraría en el extranjero en busca de una ruta para volver a España.«Este le indica que se encuentra de camino a España, y tiene las maletas retenidas en un aeropuerto extranjero o que ha perdido el vuelo por diversas circunstancias, pero su equipaje está de camino a España
Es en esa circunstancia exacta, es el momento en el que el estafador pide a la víctima potencial que le haga un ingreso, una cierta cantidad de dinero a la cuenta que se le facilita, solicitándole que ponga en el concepto ‘costes de aduana’. De este modo, según esta estafa, así se podrían enviar las maletas a España.
Gracias al uso de las redes sociales, los ciberdelincuentes pueden crear de manera sencilla un perfil para sus cuentas a través de los diferentes perfiles sociales, por lo que cuenta con especial importancia ser precavidos y evitar sustos de este tipo. Con un breve movimiento de aceptación que hagan los usuarios, los ciberdelincuentes podrían hacerse de la información suficiente como para pensar que el tipo, o la tipa, no genere ningún tipo de sospecha.
Con el objetivo de evitar este tipo de sustos, se recomienda comprobar por otras vías que, efectivamente es el contacto verdadero. Ya sea por teléfono o con otro tipo de verificación. Por último también es recomendable ponerse en contacto con la empresa (aerolínea, en este caso) a través de los canales oficiales para contrastar la información. Lo normal sería que ningún agente público, ni agente aeroportuario solicitara una cantidad económica.