El presidente de Rusia, Vladímir Putin, sostuvo una conversación telefónica con su homólogo de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, en la cual se abordaron diversos temas, principalmente el de seguridad. Ambos mandatarios expresaron su disposición de mantener los intercambios regulares al más alto nivel.
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De acuerdo con una nota del Kremlin, «el tema principal de la conversación fue la implementación del acuerdo alcanzado durante la videoconferencia del 7 de diciembre para iniciar negociaciones sobre la provisión de garantías legales para la seguridad de Rusia».
Además, refiere que Putin explicó los enfoques de los principios subyacentes en los borradores rusos del tratado entre ese país y EE.UU, así como del acuerdo con los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
«Se enfatizó que el resultado del trabajo conjunto debería ser garantías legales firmes que excluyan el avance de la OTAN hacia el este y el despliegue de sistemas de armas amenazantes en las inmediaciones de las fronteras rusas», precisó el Kremlin.
Posible ruptura de relaciones bilaterales
Según la nota de prensa, Biden enfatizó que tanto Rusia como EE.UU. tienen una responsabilidad especial en garantizar la estabilidad en Europa y en el mundo, e indicó que Washington no prevé desplegar armas en territorio ucraniano.
Ante la mención de Biden sobre adoptar sanciones a gran escala contra Rusia ante una escalada de tensiones en la situación de Ucrania, el presidente Putin calificó que esa acción sería un grave error.
El mandatario ruso afirmó que, en caso de aplicarse esas sanciones, esto amenazaría con una «ruptura completa de las relaciones ruso-estadounidenses».
Próximas conversaciones
Igualmente, se abordó la disposición de ambos jefes de Estado de mantener un diálogo serio y significativo sobre los temas de interés bilateral.
También fue ratificado que las próximas conversaciones se celebrarán del 9 al 10 de enero en Ginebra (Suiza) y luego el 12 de enero en Bruselas (Bélgica), como parte del Consejo de la OTAN-Rusia.
«Los presidentes acordaron mantener bajo control personal las discusiones sobre las vías de negociación mencionadas, y especialmente en un formato bilateral con miras a la consecución de resultados concretos lo antes posible», acotó el Kremlin.