Según todos los indicios, 2021 ha sido un año brutal para las criptomonedas, que han visto aumentar su valoración de mercado total a 2 billones de euros desde los 700.000 millones de principios de año por lo que se esperan ver desvinculación entre bitcoin y ‘altcoins’ en 2022
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Impulsado por la creciente adopción institucional, bitcoin ha llegado a alcanzar un nuevo récord histórico de casi 61.000 euros a medida que compañías como MicroStrategy, Tesla y Block (anteriormente Square) han añadido la moneda digital a sus balances. El Salvador se ha convertido en el primer país en adoptar bitcoin como moneda legal, junto con el dólar estadounidense, atrayendo intereses de otras naciones para seguir el mismo camino.
Muchos famosos, deportistas e incluso los alcaldes de Miami y Nueva York han optado por cobrar parte de su salario, si no todo, en bitcoin.
No obstante, 2021 no ha sido solo bitcoin. Ethereum, la segunda criptomoneda más grande, también se ha disparado a un nuevo récord histórico de unos 4.300 euros impulsada por un crecimiento explosivo en las finanzas descentralizadas, tokens no fungibles y actividades relacionadas con el metaverso en la red.
Para la industria, este ha sido un año de récords. En marzo, una obra de arte de NFT del artista digital Beeple se vendió por más de 60 millones de euros. En abril, Coinbase se convirtió en el primer intercambio de cifrado con sede en EEUU en cotizar públicamente en el Nasdaq. En mayo, el mercado de las criptomonedas se disparó después de que el CEO de Tesla, Elon Musk, dejara de aceptar bitcoins como método de pago, citando la enorme cantidad de energía gastada en la minería de bitcoins. En el camino, las “monedas de memes”, incluida dogecoin (favorita de Musk y rival de shiba inu), explotaron en popularidad.
Durante el verano, las cripto bajo el protocolo layer one como solana, avalanche y algorand comenzaron a competir por convertirse en el token más rápido, de menor coste y más escalable para desarrolladores. Decentraland, vinculado al metaverso, así como the sandbox lograron un reconocimiento generalizado de la noche a la mañana después de que Facebook decidiera cambiar su nombre a “Meta”. Encantados por el auge de oportunidades que han dado las criptomonedas, los inversores de capital riesgo invirtieron un récord de 26.000 millones de euros en compañías de blockchain que están ansiosas por marcar el comienzo de la llamada era Web 3.0.
Por supuesto, una mayor visibilidad conlleva mayores responsabilidades. La industria de la criptografía todavía tiene muchos problemas serios que abordar en el próximo año. En 2021, los estafadores robaron 6.800 millones de euros en criptomonedas de sus víctimas, un 81% más que el año anterior, según Chainalysis.
Mientras tanto, las controversias sobre si algunas monedas estables vinculadas al dólar estadounidense están totalmente respaldadas por sus reservas de dólares han llevado a la industria a un conflicto con los reguladores estadounidenses.
Los analistas, inversores y ejecutivos de la industria esperan ver la incorporación continua de las criptomonedas en 2022 a medida que los estadios cambien de nombre después de que las empresas de criptomonedas y los NFT continúen mezclándose con la cultura pop.
