La periodista Mónica González Mujica de la Fundación Gabo señaló que existe una profunda crisis democrática, así como corrupción a la que considera como una lepra que nadie la para.
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La realidad nos muestra que vamos avanzando sobre problemas complejos que deben ser abordados con mucho ahínco como la corrupción, La República conversó con la periodista de Fundación Gabo y nacionalidad chilena, Mónica González Mujica, quien nos muestra un panorama de los países latinoamericanos y las similitudes entre sí con Perú. Ella participó de un evento en la ciudad de Trujillo.
_¿Cuál es tu perspectiva de los países de América Latina?
_ Veo una América Latina en crisis, con una crisis democrática profunda, con estados sobrepasados, con policía fuera de control, cometiendo una represión brutal. Sobre todo, una lepra que es la corrupción que nadie lo para, cuya cara visible es el crimen organizado.
_¿Ante esto qué papel debe tomar el periodismo?
_ Ante este crimen organizado, ojo que no solo es narcotráfico, es tráfico de armas, trata de personas, es minería ilegal, entonces estamos enfrentando una situación muy compleja en la cual el periodismo debe elevar su estándar, para defender la civilización y que no nos agarremos a pelear para defender la vida.
_¿Muchos levantan la bandera de la justicia social solo para tomar el poder?
_ Pero cuál poder, si mientras no haya arremetida frontal contra la desigualdad, la informalidad contra la cantidad de mujeres que crían a sus hijos solas porque los hombres se van, tienen placer y se van y dejan solas con sus niños. Estamos con problemas graves. Ya nos acostumbramos a la corrupción, a eso se suma que nos hemos acostumbrado también a la impunidad, total si para qué si va a seguir igual. Seguir igual es la muerte.
_¿A nosotros en Perú nos golpeó fuerte este destape de corrupción con la empresa Odebrecht?
_ No hay ningún país que diga que terrible lo que han vivido los peruanos, Perú tiene una situación más compleja porque tiene una crisis que se arrastra por mucho tiempo, que tengan a los últimos presidentes formalizados por corrupción, no es banal.
Lo último que pasó con el presidente Pedro Castillo fue terrible, este pueblo lo eligió para otra cosa y la verdad que la corrupción no se fue, si antes robaron millones este equipo puede decir robó menos, pero el tema central sigue siendo la coaptación de gobiernos, congresos y políticos por un poder monopólico muy importante que traspasa fronteras.
_¿Pese a que aún sigue el proceso, se sienta un precedente de cómo manejó este tema Perú en el caso Odebrecht, cuál es tu mirada desde afuera?
Perú marcó un ejemplo en el continente como trató este tema de Odebrecht, fueron 10 países que fueron esquilmados por la corrupción de Petrobras y la Odebrecht que terrible ustedes pueden hacer un mapa que carretera importante se construyó sin coima no hay ninguna.
No nos olvidemos que los perjudicados son la gente, son nuestros pueblos y los pueblos originarios más aún, porque son los más vulnerables que estamos incubando, que un día digan ya basta o seguimos muriendo de hambre o falta de oportunidades, si seguimos viendo a nuestros hijos como están, hay un poder que se acrecienta con estos problemas.
_¿Cuál crees que es la fortaleza de ese nuevo poder que quiere imponerse?
Este nuevo poder se sostiene con información falsa para que la gente crea que no hay nadie confiable, que no se puede creer en nadie y sobre todo en aquellos que están dispuestos a enfrentar el poder real.
Siempre ha existido esto del poder grande que miente y acorralan, pero ahora lo tenemos con muchas herramientas digitales que no tuvo antes y llegan a estas personas que no tienen lo digital, les hacen llegar prebendas, con relojes, cajas de comida, entre otros para tenerlos de su lado y terminan consiguiendo.
_¿Urge un buen periodismo combativo en todos los frentes?
Los jóvenes están dispuestos a hacer un periodismo distinto para lograr destapes que evidencian la corrupción.