La solución SMARAGD puede analizar automáticamente el nombre y variantes del nombre y el BIC (número de cuenta) o ubicación del ordenante o del destinatario de un pago, entre otros factores.
as esmeraldas han sido, y son, una de las piedras preciosas más valoradas de la historia. Por su belleza y rareza han cautivado a la sociedad durante siglos. Caracterizadas por un color verde intenso, son una variedad de berilo y proceden del interior de la corteza terrestre. Su detección y obtención precisa de conocimientos técnicos altamente especializados, y cada vez más innovadores.
Su nombre en alemán es SMARAGD, el mismo que la respuesta que ofrece GFT, la consultora germana de servicios de transformación digital, para hacer frente al fraude, a la financiación del terrorismo y al blanqueo de capitales. Innovación, especialización y conocimientos técnicos de vanguardia son las características de esta herramienta.
Se trata de una solución que ya emplean los bancos centrales de Alemania, Austria y Suiza, y entidades como Deutsche Bank a nivel internacional, que se vertebra en tres ejes principales: automatización de controles en la incorporación de nuevos clientes, control en tiempo real de transacciones, y monitoreo y detección de comportamientos compatibles con el blanqueo de dinero, el fraude y los delitos financieros.
En la actualidad, las organizaciones y entidades financieras realizan una evaluación de los clientes al registrarse (historial, registros de personas sospechosas y listados de personas políticamente expuestas, noticias, etc.) y monitorean su actividad.
No obstante, la Asociación Española de Empresas Contra el Fraude (AEECF) refleja en su Informe sobre el Estado del Fraude en España 2020-2021 que un 25% de empresas reconoce tener dificultades en la lucha contra el fraude por falta de recursos y de conocimiento (19%) o por tecnología insuficiente (12%), al tiempo que cada vez se enfrentan a mayores exigencias de control por parte de los reguladores que vienen acompañadas con nuevas posibilidades de sanciones y multas.
En este contexto, GFT apuesta por una herramienta avalada por más de dos décadas de presencia en el mercado global, capaz de procesar la información de 50 millones de transacciones por día (más de 500 transacciones por segundo). Entre multitud de factores que SMARAGD puede analizar automáticamente, cabe señalar el nombre (y variantes del nombre), el BIC (número de cuenta) o ubicación del ordenante o del destinatario de un pago para detectar coincidencias en listas de sanciones, embargos, personas expuestas, etc.; la aparición de un estudiante que recibe dinero de varias fuentes durante el mes, donde el monto total supera un umbral, y transfiere ese dinero (al menos la mayor parte) a una cuenta/país extranjero (agente de blanqueo de dinero); o la observación de una empresa que muestra un gran aumento en sus actividades comerciales más allá de sus ingresos declarados (facturación falsa para el blanqueo de dinero).
Además, puede verificar direcciones de empresas offshore, así como transacciones sospechosas, fraudes y delitos financieros con criptoactivos.
La amenaza es real. Todas las cifras constatan que tanto los fraudes financieros como la importancia del cumplimiento normativa y la regulación para empresas y particulares, son fenómenos en alza. Solo apostando por soluciones ambiciosas podremos resolver los desafíos a los que se enfrentan empresas y entidades financieras, en esta materia, a nivel global.