La Justicia de Córdoba investiga a Cayetano Canto, quien en dos oportunidades fue en intendente de Saldán, por lavado de dinero. En un año y medio, el político ganó 5 veces la lotería y 260 veces en el casino, gracias a lo cual embolsó 37 millones de pesos.
La sorprendente racha de Canto alertó a la Unidad de Información Financiera (UIF) de la Nación, quien lo comenzó a investigar por lavado de dinero a él y a sus hijos. Según la investigación, el ex intendente de Saldán habría utilizado este dinero para comprar propiedades.
La sospecha sobre Canto surgió a partir de otra investigación que pesa sobre él y que data del 2020. En esa causa, el fiscal federal de Córdoba, Enrique Senestrari, investigaba al ex intendente de Saldán, y al ex intendente Mendiolaza, Daniel Salibi, por el presunto uso de facturas falsas para justificar gastos inexistentes.
En el marco de esa pesquisa, Senestrari le solicitó a la UIF los movimientos de dinero de Canto. El organismo informó que el ex intendente ganó en la lotería de Córdoba en junio de 2020, y que en 2021 la volvió a ganar en febrero, marzo, mayo y julio. Además, la UIF comunicó que el político ganó en los mismos períodos y hasta octubre del 2022, 260 veces en casinos.
Entre todos los triunfos, Cantó acumuló un tesoro de $ 37.000.000 y todas las veces que ganó en el casino cobró en efectivo. “A tal fin, habrían colocado dinero de origen espurio mezclado con dinero lícito a los fines de blanquear diferentes activos en patrimonio formal de otras personas”, explicó el fiscal Senertrari.
“Estamos en condiciones de afirmar que gran parte de las ganancias y lucro obtenidos de tales acciones fueron objeto de operaciones de blanqueo, que habrían consistido en la compra/venta de inmuebles, vehículos automotores, títulos y otros activos, varios de ellos por valores distintos a los del mercado y adquiridos con dinero de origen ilícito”, sostuvo el fiscal Senestrari en su dictamen en el que imputó a Canto y sus hijos.
Para la Justicia, Cantó blanqueó el dinero con la compra de seis autos y un inmueble. Pero la causa también abarca al negocio comercial de Canto, una pollería que fue proveedora de Saldán y de Racing de Córdoba, el club del que el ex intendente fue su vicepresidente.
