El secretario nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo, Jorge Chediak, actualizó recientemente el panorama a nivel nacional y global respecto a las estrategias de combate a estos delitos.
En un seminario celebrado en el Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay (CCEAU), Chediak expuso sobre los colectivos que presentan mayor riesgo de ser utilizados en el lavado de activos.
En su intervención, Chediak señaló que existen ciertos colectivos que presentan un perfil de vulnerabilidad considerable para ser utilizados como vehículos de lavado de activos.
Colectivos de mayor riesgo
Estos colectivos incluyen partidos políticos, clubes deportivos, iglesias y sindicatos. Debido a la estructura y flujo de dinero, los partidos políticos pueden ser utilizados para encubrir fondos de origen ilícito. Asimismo, la popularidad y el financiamiento que rodean a los clubes deportivos los convierte en objetivos potenciales para el lavado de dinero. Las donaciones y el flujo de efectivo en las iglesias pueden ser difíciles de rastrear, lo que aumenta el riesgo de ser utilizadas en actividades ilícitas, y la gestión de grandes cantidades de fondos en los sindicatos presenta oportunidades similares.
Chediak subrayó la importancia de incluir a estos colectivos en la lista de sujetos obligados a informar sobre operaciones sospechosas. Estos sujetos obligados son aquellas personas jurídicas o naturales que, por la naturaleza de sus actividades, están en una posición única para detectar y reportar transacciones inusuales.
Además, se destacó un sector emergente de riesgo, los automóviles de alta gama. Chediak mencionó que los narcotraficantes a menudo poseen colecciones de estos vehículos, lo cual podría ser una pista importante para las autoridades.
Uruguay: “No somos para nada los mejores de la clase, tampoco los peores”
En relación a la situación en Uruguay, Chediak indicó que el país enfrenta varios desafíos en cuanto al cumplimiento efectivo de las normas contra el lavado de activos. No obstante, reconoció que el país se encuentra bien posicionado en términos de cumplimiento normativo, afirmando, “No somos para nada los mejores de la clase, tampoco los peores”.
El seminario también contó con la participación de expertos de la región, quienes compartieron sus experiencias y estrategias en la lucha contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo. La colaboración y el intercambio de conocimientos entre diferentes países y sectores son esenciales para enfrentar de manera efectiva estos delitos complejos y en constante evolución.