Las grandes empresas tecnológicas siempre están bajo el escrutinio de accionistas, clientes, competidores y reguladores, quienes observan atentamente cada movimiento para evaluar oportunidades y estrategias. Sin embargo, también debemos considerar la amenaza constante de robos y ciberataques que buscan obtener información valiosa de estas corporaciones. En este contexto, surge el caso de un exingeniero de Google de origen chino que decidió sustraer secretos comerciales relacionados con inteligencia artificial para beneficiar a dos empresas en China.
Las relaciones entre Estados Unidos y China son tensas, especialmente a raíz de disputas comerciales recientes. Durante la administración de Donald Trump, se implementaron aranceles del 10% sobre productos chinos, a lo que China respondió con aranceles similares sobre productos estadounidenses, incluyendo petróleo, gas natural y vehículos grandes. En medio de esta guerra comercial, Estados Unidos ha acusado repetidamente a China de espionaje y ha tomado medidas para limitar su acceso a ciertos productos y servicios.
Ampliación de cargos contra el exingeniero de Google por robo de secretos de IA
El caso reciente de TikTok resalta las preocupaciones persistentes entre ambos países, ya que Estados Unidos ha intentado prohibir la aplicación de ByteDance para proteger la seguridad de sus ciudadanos. Aunque algunos pueden considerar estas acciones como exageradas, existen casos documentados de espionaje y robo de información por parte de actores chinos. Un ejemplo es el incidente ocurrido en marzo de 2024, cuando un ingeniero de Google traicionó a su empresa en favor de su país natal.
Casi un año después de los hechos, la fiscalía estadounidense anunció el 4 de febrero que se han presentado 14 cargos adicionales contra Linwey Ding, el exingeniero de Google, por el robo de secretos comerciales de IA en beneficio de empresas chinas. Ding, también conocido como Leon Ding, enfrenta ahora un total de siete cargos por espionaje económico y robo de secretos comerciales. Cada uno de estos cargos puede conllevar una pena máxima de 15 años de prisión y una multa de 5 millones de dólares. Además, cada cargo relacionado con secretos comerciales podría resultar en hasta 10 años de prisión y una multa de 250.000 dólares.
Las empresas chinas involucradas y el papel del exingeniero
En marzo de 2024, Ding ya había sido acusado de cuatro cargos por robo de secretos comerciales, aunque en ese momento estaba en libertad bajo fianza. Este ingeniero chino, que trabajó en Google desde 2019, trasladó más de 1.000 archivos internos en mayo de 2023. Para evadir la detección, utilizó Apple Notes en su MacBook corporativo para copiar los datos y luego convirtió los archivos a PDF. Su motivación quedó clara cuando una empresa china llamada Rongshu le ofreció un puesto como director de tecnología, donde aprovechó la valiosa información que había obtenido.
Además de esto, el ingeniero de Google se fue a China durante unos meses y fundó una startup llamada Zhisuan. Los archivos que robó incluían detalles de la infraestructura de IA de Google, incluyendo el hardware y software patentados de la empresa. El pasado 18 de diciembre se esperaba una resolución del caso de Ding, pero lo más previsible es que todo acabe en juicio y este se enfrentaría a penas de cárcel de muchos años y millones de dólares como multa.