Una nueva modalidad de fraude financiero empezó a reportarse en denuncias presentadas ante los juzgados del Ministerio Público.Empresas han empezado a promocionar nuevas formas de financiamiento a nombre de fondos de inversiones de Emiratos Árabes, aprovechando se contratistas han agotado todas sus líneas de crédito con bancos y entidades financieras formales.
Antilavadodedinero / Panamaamerica
Una de estas víctimas fue el empresario Ramsés Paulette, propietario de la empresa contratista de Construcción de obras Públicas Consulting Desing Development And Engineering, S.A., quien dijo haber sido estafado por un grupo que dice tener sede en Panamá Pacífico y que supuestamente se dedica a financiar proyectos a través de un fondo de inversión extranjero (Emiratos Árabes Unidos).
Paulette identificó a los representantes de la empresa IBG World Trading Panamá, S.A. como los supuestos responsables del fraude en su contra y en donde había de por medio un acuerdo de financiamiento de 70 mil dólares contra el pago por adelantado de una tasa que supera los 11 mil dólares.
Fue así que Paulette procedió a interponer denuncia ante el Ministerio Público, así como también una demanda en el Juzgado Primero de lo Civil.Regístrate para recibir contenido exclusivo
«Todo se veía real y autentico. Pero pasado el tiempo nunca se hizo realidad lo acordado. De allí decidí poner las denuncias ante las autoridades», dijo Paulette.
Explicó que luego de la larga paralización de la construcción por efectos directos de la pandemia, el gobierno empezó a presionar a las empresas para reactivar las obras sin adelantar los pagos pendientes.
Ello llevó a muchas empresas a agotar el crédito con sus bancos, obligando a los contratistas a considerar alternativas financieras más riesgosas y hasta el agiotismo para cumplir los programas de avance, dijo Paulette aceptando que este fue su caso.
Ante esta situación, Paulette relató que por medio de un conocido se le refirió a la empresa IBG World Trading Panamá «que supuestamente manejaba fondos de inversión provenientes de los Emiratos Árabes Unidos.Noticias relacionadas
Ellos manifestaban interés en prestar dinero para inversión en proyectos en Panamá. Luego de efectuada las debidas diligencias de conocer el estado jurídico de dicha sociedad y sus representantes, todo parecía en orden y acepté llegar a un acuerdo con ellos».
«Luego de distintas reuniones en intercambio de información con el representante legal de la empresa IBG World Trading Panamá, el señor Jerónimo Pascual Montoya, de nacionalidad española, acepté efectuar la transacción», señaló el empresario.
«Una vez acordado verbalmente el trato, se dio una reunión vía Skype con una mujer de nombre Felisa Hernández, quien supuestamente es la cabeza de la operación. En esta reunión también participó Javier Salas.
Todos mantuvieron las cámaras apagadas en la reunión virtual, algo que llama poderosamente la atención. Sin embargo, por haberme reunido con el señor Jero no le presté importancia», relató Paulette.
El empresario indicó que luego de las reuniones virtuales y presenciales con representantes de la firma de financiamiento recibió un documento vía correo electrónico en el cual se establecían los términos y condiciones de la transacción la cual incluía un pago anticipado por parte del cliente de 12 mil 500 dólares en concepto de tasa de interés.
Luego de 20 días hábiles se desembolsaría el préstamo, condición que Paulette aceptó y pagó, tomando en cuenta que el mismo documento establecía que si la transacción era cancelada por las partes antes del desembolso esta tasa sería devuelta en su totalidad inmediatamente. Transcurrido más de 2 meses después de entregado el pago de la supuesta tasa, el supuesto préstamo nunca fue desembolsado y solo recibía respuestas evasivas, denunció Paulette.
Tras ello, Puallette dijo que se comunicó IBG World Trading Panamá para acogerse a la clausula de cancelación del contrato y solicitó la devolución inmediata de los dineros entregados. Sin embargo, esa devolución nunca se ejecutó.
Ahora el empresario confía en las autoridades competentes para que hagan les debidas diligencias y se castiguen a los supuestos responsables del fraude.
«También hago un llamado a las autoridades financieras del país a que investiguen este tipo de sujetos ya que se aprovechan de las debilidades del sistema financiero y de la necesidad producto del virus.
A la vez exhorto al Gobierno a que entienda que los proyectos no se reactivan sin recursos, por lo que lo recomendable es que por un lado se reduzca el exceso de burocracia en el trámite de cuentas por cobrar y evalúen la opción de otorgar nuevos adelantos a los contratistas utilizando las herramientas consagradas en la Ley de Contrataciones Públicas.