El juez Federal Miguel Ángel Contreras, a cargo de la investigación por distintos delitos financieros que se sigue contra Edgar Bacchiani, ordenó la detención del gerente de Adhemar Capital en la provincia de Córdoba, Augusto Gabriel García Alaimo.
Antilavadodedinero / Elesquiu
Fuentes judiciales informaron a El Esquiú que, en este sentido, se dio aviso sobre la orden de captura a Interpol (Organización Internacional de Policía Criminal o Policía Internacional) con alerta roja ya que, según información que maneja la investigación, el sospechoso habría viajado a México para quedarse en ese país.
García Alaimo es quien aparentemente dirigía la cuestionada financiera en la vecina provincia y trataba directamente con los inversionistas, recibiendo el dinero de las inversiones que estos efectuaban y efectuando otro tipo de trámites relacionados a esto.
Cabe mencionar que el abogado querellante Alfredo Aydar, quien representa a decenas de denunciantes de Bacchiani en distintas provincias, había pedido que se tome esta medida a principios de junio, considerando que el referente cordobés del trader tuvo mucho que ver con los fraudes financieros.
Por otra parte, fuentes judiciales informaron que en la jornada de ayer se recibió un informe por parte del Servicio Penitenciario, donde se encuentra alojado el principal imputado, Edgar Bacchiani, sobre las condiciones tecnológicas y de conectividad para que desde la cárcel ubicada en la localidad de Miraflores, el imputado pueda ingresar a internet y, como viene prometiendo, efectuar los pagos a los inversionistas.
El imputado por estafas requería un lugar acondicionado con conexión a internet para tener la posibilidad de demostrar la existencia de fondos en su cuenta de Binance.
Desde el Penal se remitió ayer un informe que fue recibido por el juez Miguel Ángel Contreras, que da cuenta de que no están dadas las condiciones para que el “trader god” pueda tener acceso eficiente a las cuentas virtuales.
En este sentido se analiza la situación, ya que los inversionistas reclaman que Bacchiani vuelva a tener acceso a sus cuentas con la esperanza de que entregue el dinero prometido.
