La tecnología y los celulares ocupan un lugar central en la vida de la mayoría de las personas, puesto que, mediante estos dispositivos, las personas se comunican, entretienen, realizan pagos, guardan plata, y algunas, hasta trabajan.
antilavadodedinero / Diariosanrafael
Por eso en la actualidad, todos nos convertimos en un blanco muy atractivo para los ciberdelincuentes, y las estafas virtuales están a la orden día. Ante este panorama, en FM Vos 94,5, conversamos con el abogado Jorge Chávez, encargado del Programa de «Prevención de Violencia TIC y Delitos Informáticos» con especial enfoque en la protección de personas menores de edad, quien nos brindó algunos consejos para evitar esta clase de estafas.
«En el presente tenemos una variedad importante de estafas virtuales, pero todas tienen un conjunto de reglas similares en cuanto a la prevención. Un claro ejemplo es el intento de estafas que se pueden hacer por teléfono. En este caso, es fundamental no dejarse llevar por la emoción del momento, cuando comunican un incidente peligroso, ya que juegan un poco con el sentimiento de la persona. No hay que dejarlos hablar, hay que cortar directamente, y comunicarse con los parientes más inmediatos que han sido involucrados en las llamadas.
Si es un hijo, nos comunicamos con él, en caso que no responda, llamamos a su pareja, o a un amigo y alertamos sobre esta situación. El éxito de este tipo de estafa depende del grado de emocionalidad de la víctima», advirtió Chávez ni bien comenzó la entrevista.
«A veces ponen una voz gritando auxilio o socorro y uno la cree identificar como la de un conocido. Siempre se debe proceder a realizar la denuncia, ya sea al 911 o en la fiscalía que corresponda. Si uno no denuncia no se visibiliza», agregó.
Después, prosiguió explicando otro tipo de fraudes, los cuales se llevan a cabo mediante la compra y venta de ciertos productos por internet. «Hay que tener en cuenta si el negocio tiene una plataforma de servicios propios o si está tercerizado.
En caso de que sea así, hay que ver que la página web cuente con ciertos certificados de seguridad, tal como el SSL que protegen la integridad de la transacción. Hay que tener en cuenta que las URL terminan en https, por lo que eso es un indicio importante para saber si una página es segura y si ha sido visitada un montón de veces, como así también, no haya reportado incidentes de seguridad.
Por otra parte, se debe considerar el carácter de la oferta. Si ofrecen un producto a muy bajo costo, es dudoso. Las ofertas irrisorias o absurdas son un cebo para hacer este tipo de estafas», aseguró el especialista en delitos informáticos.
«Nunca hay que enviar una foto o una imagen del documento de identidad, aunque hay algunas billeteras virtuales que hoy te lo exigen. Es un riesgo muy grande y es preferible tener una billetera virtual de un banco, que contratar una de empresa privada. Siempre hay que tener mucho cuidado cuando alguien dice que se comunica desde una empresa, ya sea de la tarjeta de crédito o de un banco, o cualquiera que te pida datos.
Ante estos escenarios, uno tiene siempre que corroborar las fuentes y comunicarse con las distintas entidades y consultar si es real lo que le han dicho», señaló Jorge Chávez.
«Otra cosa que es peligrosa, es realizar consultas en los foros de internet, en los cuales la mayoría de las veces se discuten diversos problemas. Nunca hay que confiar en ello, puesto que a través de los mismos, a veces también se realizan estafas», añadió.
Asimismo, habló sobre cómo se lucha contra esta clase de delitos en Mendoza. «Hace un tiempo atrás se pudo desbaratar una banda de estafadores virtuales que operaba en la provincia. En cuanto a la recuperación del dinero, en este tipo de casos todo depende del grado de profesionalismo sobre el mecanismo de fraude que realizan. Siempre se llevan adelante todas las medidas judiciales necesarias para recuperar esos fondos, pero depende de varios factores» destacó.
«Hay mafias que clonan tarjetas de crédito, y que trabajan de manera organizada. Uno debe ser muy cuidadoso y prudente para tratar de no ser víctima de estos delincuentes.
En las estafas hay diferentes rangos etarios, por un lado, están las llamadas que apuntan a los adultos mayores, y por el otro, existe una franja de edad que comprende entre los 40 y 60 años, y que son los más propensos a sufrir el ciberdelito», aportó al cierre de la comunicación.