Bolivia vuelve a estar en la mira internacional por dos casos relacionados con narcotráfico: el descubrimiento de 10 toneladas de cocaína en Alemania, cuyo origen sería boliviano; y el accidente de una avioneta con matrícula boliviana con más de 300 kilos de droga en Argentina.
A poco más de un mes de revelarse el envío de casi media tonelada de droga de Santa Cruz a Madrid, España, Bolivia vuelve a estar en la mira internacional por dos casos relacionados con narcotráfico: el descubrimiento de 10 toneladas de cocaína en Alemania, cuyo origen sería boliviano; y el accidente de una avioneta con matrícula boliviana con unos 300 kilos de estupefacientes en Argentina.
El envío de 487 kilos de cocaína de Bolivia a España tuvo lugar el 11 de febrero de este año, pero el caso recién fue conocido en Bolivia en junio, a través de reportes de prensa, por lo que las autoridades bolivianas abrieron una investigación del caso.
Algo similar pasó con el caso de Alemania. En ese país se descubrió el cargamento ilegal de droga entre el 14 de mayo y el 5 de julio, pero esta noticia recién se conoció esta semana a través de reportes periodísticos. No obstante, se informó que la cocaína fue enviada por vía marítima, en contenedores despachados desde Paraguay. Autoridades paraguayas presumen que ese cargamento ilegal ingreso a su territorio de países vecinos, entre ellos Bolivia.
Según reportes periodísticos paraguayos, Sully Rolón, secretaria Nacional Antidrogas de Paraguay, sostuvo el fin de semana que la “única hipótesis” que tiene su despacho apunta a que el cargamento de droga descubierto en Alemania ingresó a su país desde Bolivia.
“Ellos (narcos) tienen un sistema de acopio y lo traen de alguna manera para llevar hasta los contenedores. Es en Aduanas donde es más factible el control (…) Somos 200 agentes especiales y no tenemos tecnología. Hemos pedido que existan radares. Esto ingresa por aire y se transporta por tierra”, dijo Rolón según reportó Diaria Justicia.
Autoridades paraguayas establecieron que funcionarios de ese país detectaron el transporte de las 10 toneladas de cocaína, con rumbo a Alemania, en contenedores de semilla se sésamo, a través de un scanner, pero que no dieron parte. Por ese motivo, ahora la pesquisa apunta a esclarecer de dónde y cómo ingreso la carga ilegal a su territorio.
En criterio del militar boliviano retirado Jorge Santistevan, el transporte de la droga por vía aérea desde Bolivia a Paraguay pudo haberse dado en unos tres a cuatro días, ya que se indica que hay al menos 15 vuelos diarios ilegales de transporte de droga en territorio boliviano.
En declaraciones a Unitel, Santistevan acotó que los servicios de inteligencia de países europeos como Alemania, España y Francia “han cerrado el círculo” con sus similares de Brasil y Paraguay, en sentido de que la droga tiene origen boliviano, precisamente por esa falta de control aéreo.
Con base en esa afirmación, Santistevan advirtió que Bolivia ya no es tomada en cuenta en las pesquisas de narcotráfico de orden internacional. Por ese motivo, añadió, las autoridades policiales, militares o gubernamentales ya no son informadas ni tomadas en cuenta en estos casos. “Bolivia es el país investigado por los países de la región, un país investigado no puede ser parte de la investigación”, declaró.
En el caso de Argentina, una avioneta con matrícula boliviana se estrelló, presuntamente por fallas técnicas, en la región del chaco. La aeronave llevaba más de 300 kilos de cocaína.
Las autoridades argentinas decomisaron el cargamento ilegal, pero no aprehendieron a los responsables del transporte porque se dieron a la fuga en dos camionetas, según testigos del accidente.