En relación a la cancelación de la mayoría de los fondos de la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional (USAID), utilizados para financiar distintas organizaciones en varios países del mundo, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, afirmó que, sin el dinero de esta agencia, las personas no atienden a los llamados de la oposición en su país.
Mediante una publicación en X, el mandatario explicó que la oposición del país había convocado a una «manifestación masiva contra la minería» este domingo. «Todos los partidos políticos se sumaron al llamamiento, junto con el 90 % de las ONGs, universidades, iglesias y grupos activistas», escribió.
Agregó que «llevaron a cabo una campaña de un mes en los principales medios de comunicación y las redes sociales, contaron con el apoyo de los medios de comunicación más poderosos del país, eligieron un día festivo (el domingo) para que nadie tuviera que trabajar, organizaron actos preparatorios y más».
Las personas se reunieron frente a la Biblioteca Nacional de El Salvador para protestar en contra de la reciente aprobación de un proyecto de ley, propuesto por Bukele, que permite la explotación minera en el país, prohibida desde el 2017, según medios locales.
Sin embargo, la fotografía que adjuntó a su tuit muestra una pequeña concentración con pocos asistentes. «Esto es lo que lograron. Está claro que no hay oposición sin dinero de la USAID», concluyó, añadiendo un emoji de una cara riendo.
«Operación mundial de lavado de dinero»
La USAID se encuentra en el ojo del huracán desde la revelación de que financiaba medios de comunicación estadounidenses y de todo el mundo, así como otras iniciativas relacionadas con la comunidad LGBT* en América Latina.
Por su parte, Bukele se ha dirigido a X en varias ocasiones para arremeter contra la injerencia de la agencia en El Salvador y demás naciones de la región. El sábado, publicó en la red social que «la gran mayoría de los periodistas y medios ‘independientes’ son, en realidad, parte de una operación mundial de lavado de dinero cuyo objetivo es impulsar la agenda globalista, junto con las ONGs financiadas bajo el mismo esquema».
En otra interacción, el mandatario agregó: «‘Periodismo independiente’ no es más que un eufemismo para decir ‘nuestros jefes están en la oscuridad’».
Año a año, la USAID destinaba millones de dólares a periodistas, defensores de los derechos humanos y opositores a los gobiernos, con los que la Administración de turno en la Casa Blanca tenía mayores tensiones o incluso aplicaba medidas de presión para generar cambios políticos.