El secretario jurídico de la Presidencia de El Salvador, Conan Castro, rechazó el vínculo entre el Gobierno de Nayib Bukele y el excomandante guerrillero José Luis Merino, señalado de encabezar una supuesta red criminal a la sombra de Petróleos de Venezuela (PDVSA).
Antilavadodedinero / Lavanguardia
«Voy a rechazar categóricamente la relación con José Luis Merino. No existe ningún tipo de relación con esa persona», aseguró escuetamente el funcionario durante una entrevista televisiva en la que fue preguntado por un artículo de un medio de EE.UU. que cita un informe que señala el supuesto vinculo.
Merino fue el responsable de liderar la millonaria inversión de PDVSA en Alba Petróleos de El Salvador, empresa fundada principalmente por alcaldes de la exguerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
En julio de 2016, el ex fiscal general Douglas Meléndez (2015-2018) reveló que Merino, conocido como «Ramiro» durante la guerra civil (1980-1992), era investigado desde 2014 por supuestamente traficar drogas y armas con la guerrilla colombiana FARC.
Alba Petróleos y otras empresas vinculadas a esta fueron allanadas por la Fiscalía en mayo de 2019 como parte de una investigación que realiza por supuesto lavado de dinero.
Un informe del consultor y periodista estadounidense Douglas Farah, publicado este lunes, señala la existencia de supuestos vínculos entre el Gobierno Bukele con «redes ilícitas» de PDVSA lideradas por Merino.
El documento, que fue dado a conocer mediante el sitio en internet de la estadounidense IBI Consultoría, de la que Farah es presidente, señala que el Ejecutivo de Bukele «sigue profundamente penetrado por elementos criminalizados» de la izquierda y derecha tradicional vinculados con Merino.
Expone que «es legítimo cuestionar qué influencia tienen Merino y otros en la actual administración» a raíz de que su asesor económico formó parte de los directorios de varias subsidiarias de Alba Petróleos y fue asistente del excomandante guerrillero por una década.
Esto en referencia a Erick Vega, a quien el informe de Farah vincula con el medio hermano del exguerrillero, Sigfredro Merino, en viajes a Caracas, Venezuela, «para reunirse con líderes del régimen de (Nicolás) Maduro y el liderazgo de varios bancos rusos que operan allí».
El primer viaje que Bukele realizó como presidente electo fue en abril de 2019 a República Dominicana y entre sus acompañantes estaba Vega, señala el documento.
Otro factor, que de acuerdo al informe, genera sospecha sobre la relación de Merino con el actual gobierno salvadoreño es que dos de sus ministros, su jefa de gabinete y «otros altos funcionarios han tenido tratos financieros con la empresa Alba Petróleos».
Entre los mencionados se encuentran los primos Federico y Pablo Anliker, titular de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) y ministro de Agricultura, respectivamente.
Estos funcionarios, según el informe, fueron parte de una empresa que habría recibido 13,5 millones de dólares de Alba Petróleos como un préstamo que no fue reembolsado.
Por otra parte, también es mencionada Carolina Recinos, jefa del Gabinete de Bukele y quien supuestamente trabajó para el medio hermano de Merino y fue responsable de tareas «administrativas para varias empresas de Alba Petróleos».
Sin referirse a ninguno de los funcionarios mencionados en el documento, Castro sostuvo durante la entrevista televisiva que el partido Nuevas Ideas, surgido de un movimiento fundado por Bukele, esta formado por gente descontenta con las formaciones tradicionales.
«Han habido señalamientos específicos respecto de gente que trabaja con nosotros del FMLN y debo ser honesto: nuestro partido, Nuevas Ideas, realmente se ha venido creando a través de gente que ha estado en descontento con el FMLN o de Arena (Alianza Republicana Nacionalista)», señaló.
Añadió, sin dar detalles, que estas personas «han venido a darle vida a este partido, porque buscan una solución» y «han creído en el proyecto de Nuevas Ideas y en el presidente Bukele».
De acuerdo a una publicación de un medio local, citada por el referido informe, la Fiscalía no logró establecer el origen de transacciones por más de 3.242 millones de Alba Petróleos, sin que hasta la fecha se conozcan avances en la investigación.
El 11 de septiembre de 2019, la revista Factum publicó que Bukele supuestamente recibió 1,9 millones de dólares provenientes de la referida empresa en 2013, cuando era alcalde de la pequeña localidad de Nuevo Cuscatlán.
Bukele señaló un día después, al ser preguntado por un periodista, que en esa época «no era mala palabra hacer negocios con Alba Petróleos».
«Yo no hice negocios con Alba Petróleos, yo hice negocios con una empresa que hizo negocios con Alba Petróleos», apuntó el mandatario en una conferencia de prensa.