China sigue importando petróleo iraní, a pesar de la entrada vigor del nuevo bloqueo por parte de EEUU a Irán hace tres meses.
Los petroleros chinos han encontrado una burda triquiñuela para esquivar la prohibición. Las embarcaciones cambian su nombre en alta mar para hacer las entregas, según informa Reuters. Pacific Bravo apagó su transpondedor en mitad océano Índico mientras llevaba sus depósitos lleno de petróleo, para encenderse un mes en la misma ubicación con distinto nombre, pero manteniendo el mismo número identificación de la Organización Marítima Internacional y ya con los depósitos vacíos.
Pacific Bravo, un petrolero chino con capacidad para transportar dos millones de barriles de crudo, desapareció, en mitad del océano Índico en dirección al estrecho de Malaca, al apagarse su transportador, el sistema de navegación utilizado para localizar buques, el pasado 5 de junio. EEUU ya había advertido a todos los países de Asia que prohibieran atracar al navío por llevar en sus cisternas crudo procedente de Irán.
El 18 de julio, un petrolero de las mismas característica apareció en las pantallas de los controles marítimos de repente y en una zona más o menos cercana donde habían desaparecido el Pacific Bravo. El presunto nuevo carguero se llamaba Latin Venture se activó el transpondedor en alta mar en Port Dickson, Malasia, en el Estrecho de Malaca, a unos 1.500 km desde donde el Bravo del Pacífico había estado señalando su posición por última vez.
Tanto Latin Venture como Pacific Bravo transmitieron el mismo número de identificación único, IMO9206035, emitido por la Organización Marítima Internacional (IMO), según los datos del proveedor de información Refinitiv y VesselsValue, una compañía que rastrea los buques y las emisiones de los de buques.
El número de IMO es como el número de bastidor de un coche es único y solo lo puede tener una embarcación. Latin Venture y Pacific Bravo eran el mismo barco y la única explicación para realizar una operación parecida corresponde al objetivo de evitar las sanciones de EEUU. Y más cuando Latin Venture, tenía los depósitos vacíos de petróleo.
El buque es propiedad de Kunlun Holdings, que, según los datos de Equasis.org, un sitio web de transparencia de envío creado por la Comisión Europea y la Administración Marítima Francesa, tiene su sede en Shanghai.
Según una declaración del Departamento de Marina de Malasia, el Latin Venture ingresó a Port Dickson el 29 de junio para un cambio de tripulación y partió el 18 de julio. La declaración decía que no se descargó ninguna carga.
Estados Unidos volvió a imponer sanciones a Irán en noviembre después de retirarse de un acuerdo de 2015 que involucra a Teherán y seis potencias mundiales para kimitar el programa nuclear de Irán. Con el objetivo de reducir las ventas de petróleo de Irán a cero, Washington en mayo puso fin a las exenciones de sanciones otorgadas a algunos importadores de petróleo iraní.
Es la última artimaña que utiliza China para seguir importantdo crudo de Irán. Hace un mes decenas de petroleros provenientes de Irán están descargando millones de barriles de petróleo iraní a los tanques de almacenamiento aduaneros de los puertos chinos, para esquivar las sanciones. EEUU anunció sanciones a la empresa estatal china Xhuhai Zhenrong por violar las restricciones impuestas sobre el sector petrolero de Irán.
ALD/Infobae