La Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó este viernes un proyecto de ley para legalizar la marihuana en todo el país y eliminar las sanciones penales para cualquiera que la distribuya o la posea.
Antilavadodedinero / Actualidadrt
El proyecto, denominado Ley de Eliminación y Reinversión de Oportunidades de Marihuana (MORE, por sus siglas en inglés) ya había sido aprobada en 2020, pero no avanzó en el Senado.
Además de despenalizar la marihuana a nivel federal, el proyecto de ley establecería procedimientos para eliminar condenas anteriores no violentas por marihuana de los registros de las personas.
Al mismo tiempo, impondría un impuesto federal sobre las ventas de marihuana para financiar programas destinados a ayudar a las comunidades perjudicadas por las políticas de la llamada ‘guerra contra las drogas’ que establecieron castigos severos, ofreciendo asistencia legal, servicios de reingreso y programas de recreación para jóvenes.
El impuesto comenzaría en 5 %, durante los primeros dos años, después de la promulgación, y aumentaría gradualmente al 8 % en el quinto año de implementación.
Los legisladores aprobaron el proyecto en una votación de 220-204 y ahora necesita la aprobación del Senado, antes de dirigirse al escritorio del presidente Joe Biden para convertirse en ley.
Durante el debate, los representantes demócratas argumentaron que la prohibición federal de la marihuana en la nación ha tenido consecuencias particularmente devastadoras para las comunidades minoritarias, siendo que los ciudadanos afroamericanos tienen cuatro veces más probabilidades de ser arrestados por posesión de marihuana que los ciudadanos blancos.
«Durante demasiado tiempo hemos tratado la marihuana como un problema de la justicia penal en lugar de una cuestión de elección personal y de salud pública», dijo el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerry Nadler, principal patrocinador del proyecto de ley.
Por otro lado, los republicanos que se opusieron a la medida, dijeron que la marihuana es una droga de entrada que conduciría a un mayor uso de opioides y a otras sustancias peligrosas.