Un ciudadano canadiense y ex residente de San Diego, California, fue sentenciado hoy en un tribunal federal a 20 años de prisión, seguidos de 36 meses de libertad supervisada, por conspirar con otros para brindar apoyo material a terroristas involucrados en actividades violentas como asesinato, secuestro y mutilación de personas en Siria.
antilavadodedinero / justice.gov
Según documentos judiciales, Abdullahi Ahmed Abdullahi, de 37 años, de Edmonton, Alberta, Canadá, proporcionó dinero y personal para apoyar las violentas actividades yihadistas del Estado Islámico de Irak y al-Sham (ISIS), una organización terrorista extranjera. Desde noviembre de 2013 hasta marzo de 2014, Abdullahi alentó, ayudó y ayudó financieramente a seis ciudadanos norteamericanos a viajar a Siria, donde se unieron a ISIS y participaron en batallas armadas para obtener el control de los territorios y las poblaciones civiles dentro de Siria. Estas seis personas incluían a sus tres primos de Edmonton, Canadá, un primo de 18 años de Minneapolis, así como al residente de San Diego, Douglas McAuthur McCain.
El 15 de septiembre de 2017, en cumplimiento de una solicitud de extradición de Estados Unidos, las autoridades canadienses arrestaron a Abdullahi. Abdullahi fue detenido bajo custodia canadiense sin derecho a fianza, pendiente de extradición. El 24 de octubre de 2019, Canadá extraditó a Abdullahi a San Diego para enfrentar los cargos de apoyo material en la acusación formal. Abdullahi se declaró culpable de todos los cargos el 17 de diciembre de 2021.
Abdullah admitió que luego de la partida de esos combatientes extranjeros, también hizo que se transfiriera dinero a terceros intermediarios de ISIS en Gaziantep, Turquía, ubicado aproximadamente a 40 millas de la frontera con Siria, con el propósito de continuar apoyando a sus cómplices en actos violentos yihadistas. actividades en el campo de batalla. Según los informes, las seis personas murieron posteriormente luchando por ISIS.
Abdullahi también admitió que para financiar el viaje de otros a Siria, los miembros de la conspiración alentaron a Abdullahi y a otros a robar y cometer fraude contra los “kuffar”, un término peyorativo que se usa para describir a los no musulmanes, alegando que tal actividad criminal estaba permitida bajo Ley islámica. Abdullahi admitió que con el fin de recaudar fondos para apoyar las actividades terroristas violentas en Siria, él personalmente cometió un crimen violento: el robo a mano armada de una joyería en Edmonton, Canadá, el 9 de enero de 2014. A las pocas semanas de cometer ese robo, Abdullahi transfirió dinero a San Diego, por un total de aproximadamente $3,100, con el propósito de financiar el viaje de Douglas y el viaje del primo de Minneapolis de 18 años a Siria para unirse y luchar por ISIS.
El Fiscal General Adjunto Matthew G. Olsen de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia, el Fiscal Federal Randy Grossman para el Distrito Sur de California, el Director Adjunto Robert R. Wells de la División Antiterrorista del FBI y la Agente Especial a Cargo Stacey Moy del Campo de San Diego del FBI La oficina hizo el anuncio.
El FBI, la Fuerza de Tarea Conjunta contra el Terrorismo de San Diego, el Servicio Federal de Alguaciles Aéreos, las Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) del Departamento de Seguridad Nacional, la Patrulla Fronteriza de EE. UU. y la Oficina de Operaciones de Campo de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. investigaron el caso. La Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia y los socios canadienses encargados de hacer cumplir la ley, incluida la Real Policía Montada de Canadá; Servicios de Policía de Edmonton; la Fiscalía de la Corona de Alberta; el Ministerio Público de Canadá; y la Oficina del Fiscal de la Corona de Canadá, fueron fundamentales en los esfuerzos de los Estados Unidos para enjuiciar a Abdullahi y combatir el terrorismo internacional.
Los Fiscales Federales Auxiliares Shane Harrigan y Fred Sheppard del Distrito Sur de California procesaron el caso con la valiosa ayuda del Abogado Litigante Andrew Sigler de la Sección de Contraterrorismo de la División de Seguridad Nacional.
