Los procesados estaban desde hace 11 años en la cárcel. En el año 2009 algunos pudieron salir del país pero a los demás los pusieron tras las rejas.
Antilavadodedinero / AP
Un tribunal de Bolivia absolvió el martes a 39 procesados en un polémico juicio por supuesto terrorismo que se tramitaba desde hace 11 años. La Fiscalía retiró los cargos a los acusados, varios de ellos empresarios y líderes opositores al expresidente Evo Morales
“La sentencia absolutoria de los encausados significa que ha concluido el proceso. El Tribunal determinó que quedan absueltos de pena”, informó el fiscal Marco Antonio Rodríguez.
Algunos de los acusados rompieron en llanto tras escuchar al juez Sixto Fernández. “Ha sido una tortura que duró once años”, dijo Svonko Matkovic.
El Ministerio de Gobierno, uno de los principales acusadores, retiró los cargos. “Todo fue un show montado por el anterior gobierno para perseguir a los opositores”, dijo su titular Arturo Murillo en pasados días.
Entre los acusados está el general retirado Gary Prado, quien en 1967 capturó al guerrillero Ernesto Che Guevara en las selvas bolivianas.
El caso se remonta a abril 2009 cuando la policía allanó un hotel y dio muerte a tres supuestos mercenarios, entre ellos al húngaro boliviano Eduardo Rosza, al húngaro rumano Arpád Magyarosi y al irlandés Michael Dwyer. Otros dos fueron detenidos.
La policía dijo que hubo un tiroteo, pero las pericias pusieron en duda esa versión.
Morales dijo entonces que la policía había desmontado una trama de la derecha para asesinarlo en que afrontaba una dura embestida opositora liderada por varios gobernadores opositores.
Los líderes de la protesta opositora huyeron del país alegando persecución. Otros pasaron más de 10 años en la cárcel sin que se les haya probado los cargos de terrorismo.
Desde un inicio el caso tuvo un manejo político, lo que evitó conocer la verdad de ese dramático episodio y los motivos para la llegada de ese grupo de extranjeros que al parecer pretendían entrenar milicias para la defensa de Santa Cruz ante un eventual ataque del gobierno que nunca se produjo.
Rosza era un mercenario que estuvo en la guerra de los Balcanes.
Morales, actualmente asilado en Argentina, afronta también una demanda por “sedición y terrorismo” que le inició el actual gobierno.