Esto ocurre como respuesta al inesperado ataque del grupo militante palestino Hamás desde Gaza el sábado que provocó una de las mayores escaladas en años en el conflicto palestino-israelí.
Hamás lanzó una ola de ataques con cohetes y envió decenas de combatientes armados que consiguieron penetrar el territorio de Israel por la frontera sur.
La ofensiva dejó cientos de muertos y heridos, además de un grupo indeterminado de rehenes.
Estas son 3 claves de la escalada sin precedentes del conflicto palestino-israelí:
1. Penetración de Hamás en Israel
Militantes armados palestinos consiguieron burlar la defensa israelí, penetrar en su territorio y provocar decenas de muertes en las primeras 24 horas.
Hamás ha lanzado muchos ataques contra Israel en el pasado y con numerosas tácticas, pero los expertos dicen que jamás intentó algo tan audaz.
Se trata de un ataque sofisticado y brutal, lanzando cientos de misiles antes de penetrar en territorios israelíes.
El asalto Gaza implicó también operaciones marítimas.
El Ejército israelí, que respondió con ataques aéreos en Gaza, informó que las fuerzas navales habían matado a decenas de militantes palestinos que intentaban penetrar el territorio israelí por mar.
La frontera entre Israel y la Franja de Gaza está fuertemente fortificada.
Se supone que la valla rematada con alambre de púas era una barrera para evitar exactamente el tipo de infiltración que tuvo lugar en este ataque.
Sin embargo, los militantes de Hamás se abrieron paso con excavadoras, cortando agujeros en los cables y entrando a Israel desde el mar y en parapente.
La infiltración de militantes palestinos en territorio israelí le permitió al grupo islámico no solo causar víctimas mortales en el interior de Israel sino también tomar rehenes.
Un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel confirmó que «soldados y civiles» han sido secuestrados por militantes, pero no suministró el número de cautivos.
Hamas dijo que tiene 53 «prisioneros de guerra».
«Videos de hombres armados de Hamas manteniendo cautivos a soldados y civiles israelíes en Gaza han enfurecido y alarmado a Israel», indica el corresponsal de la BBC Jeremy Bowen.
2. Fallo de inteligencia
Analistas describen lo ocurrido como un fallo colosal de seguridad de Israel, el peor en medio siglo.
“Israel tiene una de las redes más extensas y sofisticadas de inteligencia en Medio Oriente tanto a nivel doméstico como extranjero. Sus informantes están infiltrados dentro de grupos militantes no solo en territorios palestinos sino también en Líbano, Siria y otros países”, explicó Frank Gardner, corresponsal de seguridad de la BBC.
Por eso llama la atención que Hamás fue capaz de sorprender en secreto a los israelíes justo después de finalizar el Sucot, una fiesta importante para el pueblo judío.
“Se da por hecho que Israel responderá con fuerza masiva, pero ahora los israelíes se preguntarán cómo los espías de su nación fallaron en prevenir esto y advertir al país”, añadió.
El corresponsal de seguridad de la BBC indicó que con los esfuerzos combinados del Shin Bet, la inteligencia interna israelí; el Mossad, su agencia de espionaje externa, y todos los activos de las Fuerzas de Defensa de Israel, para muchos es francamente sorprendente que nadie viera venir esto.
O si lo hicieron, no actuaron en consecuencia, escribió Gardner.
«Un ataque tan complejo y coordinado que implicó el almacenamiento y el lanzamiento de miles de cohetes, justo delante de las narices de los israelíes, debe haber requerido niveles extraordinarios de seguridad operativa por parte de Hamás», concluyó.
3. Retórica de guerra
La retórica de los líderes israelíes y palestinos marca la gravedad de estos enfrentamientos.
Netanyahu dijo que el país estaba en guerra y que esto no se trataba de una operación o una escalada.
Y el presidente palestino, Mahmud Abás, dijo que su pueblo tiene el derecho de defenderse del «terror de colonos y tropas de ocupación».
El comandante militar de Hamás, Mohammad Deif, anunció el inicio de la operación en un comunicado en el que llamó a los palestinos de todo el mundo a luchar. «Este es el día de la mayor batalla para acabar con la última ocupación de la Tierra», dijo.
Por su parte, el ministro israelí de Defensa declaró que «las tropas están luchando contra el enemigo en todos lados» y autorizó la llamada a filas de los reservistas.
Los expertos esperan que los próximos días y semanas sean muy duros para los habitantes de ambos territorios.
En Gaza, la gente se apresuró a comprar provisiones en previsión de los días de conflicto que se avecinaban. Algunos evacuaron sus hogares y se dirigieron a refugios.
Y la comunidad internacional mira con preocupación un conflicto lejos de conseguir un acuerdo de paz y que ahora vive una etapa muy grave.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá el domingo, informaron diplomáticos, para analizar lo ocurrido en las últimas horas.