En el sur de Quito hay sectores en los que se ubican pequeños locales de apuestas deportivas de diferentes marcas, a pocas cuadras unos de otros.
Están llenos de monitores encendidos que muestran listados de cientos de pronósticos de partidos de fútbol, de básquet, de tenis, de carreras hípicas y de otros deportes. «Hay partidos de todos los países, de todas las ligas que se pueda imaginar.
Hay partidos de hoy, de mañana, del fin de semana, si quiere también hay juegos de casino», dice la joven que atiende en un punto de apuestas deportivas en el sector del Mercado Mayorista, en la Argelia. Cerca de las 9:30 del martes 7 de mayo de 2024, a este sitio ya habían llegado dos hombres en menos de 10 minutos.
Uno apostó USD 5 y otro apostó USD 20. Los dos hombres llegaron, se tomaron un par de minutos para leer las pantallas y apostaron. Pagaron en efectivo y se fueron sin dejar sus datos y sin pedir algún comprobante como factura o nota de venta. Ese día, el partido que más llamaba la atención era el del Real Madrid con el Bayern Munich.
Apostar a que ganaba el equipo favorito, que en este caso era el Real Madrid, dejaba menos ganancia. En cambio, ir por el Bayern Munich prometía más retorno porque el jugador tomaría un mayor riesgo, ya que era menos probable que ganara este equipo. Por ejemplo, al apostar USD 2 al Real Madrid el jugador ganaba USD 3,66. Pero, si daba la misma cantidad por el Bayern Munich, ganaba USD 7,28.
Al final, se impuso el favorito. Poco control a las apuestas en efectivo Se trata de locales en los que resulta fácil apostar en efectivo, sin muchos controles de identidad o del origen del dinero. En este local, los clientes pueden apostar desde USD 1 como mínimo, hasta USD 20 en efectivo.
Pero, si quisieran apostar más dinero, incluso sin límite, explica la vendedora, solo necesitan crear una cuenta en el sitio web del portal de apuestas. Para crear una cuenta, el jugador tiene que proporcionar un correo electrónico y su nombre. Luego, para recargar cualquier cantidad de dinero, el jugador deberá ir a uno de los locales físicos, dar su nombre de usuario y pagar en efectivo la cantidad que desee apostar.
Llama la atención que esta empresa también permite hacer recargas a través de su sitio web, con una transferencia bancaria. Pero la transferencia se realiza a una cuenta cuyo titular es una empresa con un RUC y con un nombre distinto. Apuestas deportivas: la ludopatía crece y afecta especialmente a menores de edad
Al frente de este local hay otro, de otra marca de apuestas. Son las 10:00 y en este sitio ya hay siete personas apostando. En este local los jugadores pueden apostar desde USD 0,50 por partido hasta USD 200 en efectivo, sin registrarse o crear una cuenta, por lo que tampoco es necesario entregar datos personales.
Al pagar en este local, el apostador no recibe una factura o un comprobante autorizado por el Servicio de Rentas Internas (SRI), solo un ticket que comprueba a quién apostó. «Yo vengo todos los días. Antes apostaba hasta USD 15 diarios, pero perdí mucho, a mi esposa no le gusta. Ahora apuesto dos dolaritos, en unos cuatro o cinco partidos», dice Luis (nombre cambiado).
Antes de apostar, Luis hizo una rápida consulta en la aplicación Flashcore en su celular, para revisar qué tan probable es que el equipo al que le va a apostar gane. Pero, mientras revisaba el historial del Villarreal ante el Sevilla, también reconoció que «todo es suerte, por más que uno sepa mucho» de fútbol.
Un día antes, relata Luis, apostó a que ganaría el Paris Saint-Germain ante el Borussia Dortmund, «porque era lo más probable, pero ya ve, perdió, qué me iba a imaginar». Luis explica que las ganancias son mayores cuando se hacen apuestas combinadas de varios partidos, pero hay más riesgos. Si hace apuestas combinadas y falla en tan un solo partido, perderá todo su dinero aunque haya ganado en el resto.
Pero, si acierta en los cinco, las sumas serán más altas. «Por ejemplo, digamos que hago estas 15 apuestas, de USD 0,50 cada una y gano en todas, me llevo USD 120 o USD 180», dice Luis mientras selecciona partidos al azar solo para mostrar cuánto se puede ganar.
Esa sensación vuelve más adictivo al juego. ¿Y los controles a la identidad y la edad de los apostadores? Hay portales digitales de apuestas en los que los jugadores se pueden registrar solamente con su nombre, correo electrónico, su fecha de nacimiento y un número de celular. No se requiere la cédula para verificar que la información es correcta o para evitar, por ejemplo, que apuesten menores de edad.
En otros, en cambio, se puede crear la cuenta con esos mismos datos, pero al momento de querer hacer recargas de dinero a través del portal web, se requiere ingresar el número de cédula. En otros, incluso se solicita que se suba una foto de la cédula. Los sitios con más seguridades de este tipo son los que tienen Registro Único de Contribuyente (RUC) local y operan formalmente con puntos de venta físicos. Sitios web incentivan a apostar sin controles En Ecuador, desde 2011 la Constitución prohíbe los negocios con fines de lucro que ofrezcan juegos de azar y apuestas, explica la experta tributaria Yael Fierro. Sin embargo, en 2019, la Procuraduría emitió un dictamen en el que aclara que la prohibición es para los juegos de azar y no para los de pronósticos, añade. Por eso, los representantes de algunas de las empresas que se dedican a esta actividad y que operan formalmente con un RUC aseguran que no están contraviniendo lo que dice la Constitución.
Ellos aseguran que no se dedican a juegos de azar sino a pronósticos deportivos en los que la persona aplica conocimientos sobre los juegos. Las casas de apuestas deportivas invaden al fútbol, ¿son legales en Ecuador? En algunas plataformas de apuestas deportivas y de casinos, incluso se incentiva a que los jugadores apuesten en línea asegurando que son legales.
«Es cierto que, en Ecuador, los casinos físicos no están permitidos. No obstante, sus equivalentes en línea sí se permiten, siendo esta la principal ventaja de registrarse en estos», dice en su sitio web una plataforma de apuesta que opera en el país.
Este sitio web en particular ofrece más de 1.000 juegos de casino. ¿Cuándo comenzarán los controles? Fierro explica que uno de los intentos de poner la lupa sobre estos negocios ocurrió en junio de 2023, cuando el Gobierno del entonces presidente Guillermo Lasso emitió la Ley para el Fortalecimiento de la Economía Familiar, en la que creó un sistema de impuesto especial de 15% para estas empresas.
Más adelante, en diciembre de 2023, en la Ley de Eficiencia Económica, ya en el Gobierno de Daniel Noboa, se hicieron algunos ajustes. Por ejemplo, se estableció que el impuesto entre en vigencia en junio de 2024 y que todas las empresas, incluyendo las extranjeras, deben registrarse en un catastro del Servicio de Rentas Internas y pagar impuestos en Ecuador.
Si no lo hacen, se faculta al Gobierno a bloquear la IP de los sitios para que no sigan funcionando en Ecuador. Sin embargo, todavía no se ha creado el catastro. Hoy, la mayoría de sitios de apuestas deportivas online que operan en Ecuador está domiciliada en Curazao y Malta.
Fierro explica que hay cuatro factores por los que estas localidades son atractivas para este tipo de empresas: Regulaciones legales favorables y más flexibles.
Obtener una licencia de juego en estos países puede ser más rápido y menos costoso. Los impuestos sobre los ingresos generados por las apuestas suelen ser más bajos que en otros países, lo que resulta en mayores márgenes de beneficio para las empresas. Cuentan con una infraestructura sólida en términos de tecnología y telecomunicaciones.
