Ante el avance de la tecnología, grupos delictivos agregaron a sus sistemas de estafas los pago electrónicos con código QR, fraudes con billeteras digitales, aplicaciones de pago, criptomonedas y esquemas de “compre ahora, pague después”, por mencionar algunos de acuerdo con el estudio “El verdadero costo del fraude en América Latina”, realizado por Forrester Consulting y LexisNexis Risk Solutions.
En la investigación se destaca que en servicios financieros, las estafas tuvieron un crecimiento de 64 por ciento; el fraude de billetera digital, 60 por ciento; y el engaño enfocado en las transacciones móviles, 56 por ciento.
“Con la creciente popularidad de los métodos de pago digitales, los delincuentes han encontrado formas de explotar las vulnerabilidades de estos sistemas.
“El 60 por ciento de las instituciones financieras de los encuestados informaron un aumento en el fraude con billeteras digitales, mientras que los minoristas señalaron el fraude dirigido a las transacciones móviles como una tendencia creciente”, indicó el informe.
Forrester y LexisNexis destacaron que una mayor complejidad en los tipos de fraude, sobre todo los digitales, tiene graves implicaciones para los negocios.
No todos los códigos QR son seguros
Los códigos QR se han popularizado y hoy son ubicuos para acceder a páginas web y pagar todo tipo de productos y servicios. Sin embargo, no todos son seguros, y algunos pueden ser utilizados por los ciberdelincuentes para llevar a cabo distintas estafas con los que robar datos personales o bancarios. Te contamos qué tipos de fraude hay y qué medidas puedes tomar para evitar ser víctima de estafas con códigos QR.
Los códigos QR, abreviatura de ‘quick response’ o respuesta rápida, en español, son como los códigos de barras. Contienen una información asociada que, al ser escaneada por la cámara de un teléfono móvil, llevan al usuario a un enlace con la información almacenada en ella.
En el mundo digital de hoy, los códigos QR son una herramienta práctica en restaurantes, para consultar la carta; en la vía pública, para conectarse automáticamente a una red Wi-Fi; en los parkings, para pagar el estacionamiento de un vehículo o simplemente para redirigir a un sitio web.
Los ciberdelincuentes aprovechan la prevalencia de los códigos QR para llevar a cabo estafas con las que pueden apropiarse de información personal, con el fin de suplantar la identidad, y los datos bancarios, con el objetivo de hacerse con el dinero de los individuos que los utilizan.
Prácticas para evitar estafas con el código QR
• Antes de escanear cualquier código público, como en un restaurante o en la calle, obsérvalo y comprueba que no haya sido manipulado o se trate de una pegatina colocada encima del original por los estafadores.
• Para evitar que descarguen en tu dispositivo un virus, u otro malware, puedes instalar un software antivirus para comprobar que los códigos QR son originales y no contienen enlaces fraudulentos.
• Presta atención a la vista previa del enlace del código QR. Cuando escanees un código, debería aparecer una vista previa de la URL en tu teléfono. Comprueba que la dirección web o URL a la que te redirecciona parece legítima. Recuerda buscar un símbolo de candado junto a la URL y que empiece por “https://”. Estas URL son seguras.
• Si la aplicación o página web de destino te pide datos personales, desconfía. En ese caso verifica su autenticidad.