Cómo operan los estafadores que suplantan instituciones financieras

Recuerda que ninguna institución financiera legítima pide dinero para prestar dinero. Si algo parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente sea una estafa. ¡No te arriesgues y protege tu dinero!

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) emitió una alerta sobre el aumento de fraudes cometidos por suplantadores de identidad en el sector financiero. Estas personas o grupos delictivos se hacen pasar por instituciones legítimas para engañar a los usuarios y robar su dinero.

El problema ha crecido debido a la facilidad con la que los delincuentes pueden copiar logotipos, nombres y elementos visuales de bancos y financieras reconocidas. Esto ocurre tanto en folletos físicos como en plataformas digitales, incluyendo sitios web falsos, redes sociales y aplicaciones móviles.

Modus operandi de los suplantadores

Los estafadores han perfeccionado su estrategia para hacer que las víctimas confíen en ellos. Condusef advierte que estos delincuentes suelen actuar de la siguiente manera:

1. Uso indebido de identidades

  • Crean páginas web o perfiles en redes sociales que imitan a los de instituciones financieras legítimas.
  • Alteran mínimamente logotipos y nombres para parecer confiables.
  • Utilizan correos electrónicos o números de teléfono que parecen oficiales.

2. Solicitudes de información personal

Contactan a las víctimas a través de WhatsApp, mensajes de texto o llamadas telefónicas.

Piden datos personales como nombre, dirección, CURP y hasta datos bancarios.

Usan esta información para cometer fraudes o robo de identidad.

3. Exigen anticipos de dinero

  • Solicitan depósitos o pagos en efectivo a nombre de personas o empresas distintas a la financiera suplantada.
  • Justifican estos pagos como gestión del crédito, adelanto de mensualidades, apertura de cuenta o garantía.
  • Generalmente, el monto solicitado es el 10% del crédito prometido, que puede ir desde $1,000 hasta $200,000 pesos.

Desaparición tras recibir el dinero

  • Una vez que la víctima hace el pago, los estafadores cortan toda comunicación.
  • El dinero depositado nunca se devuelve y el crédito nunca se otorga.
  • Las víctimas quedan sin opciones para recuperar lo perdido.

Cómo evitar caer en estos fraudes

Para protegerte de estas estafas, sigue estas recomendaciones de la CONDUSEF:

Consulta el SIPRES

  • Antes de contratar cualquier servicio financiero, verifica que la empresa esté registrada en el Sistema de Registro de Prestadores de Servicios Financieros (SIPRES). Puedes hacerlo en:

Nunca pagues anticipos

  • Si una supuesta financiera te pide dinero por adelantado, desconfía. Ninguna institución regulada por CONDUSEF cobra anticipos para otorgar un crédito.

Protege tus datos personales

  • Evita compartir información sensible a través de redes sociales, WhatsApp o llamadas desconocidas. Las financieras legítimas tienen procesos formales de solicitud.

Revisa los contratos

  • Antes de firmar cualquier documento, lee con atención y asegúrate de entender todas las condiciones. No te dejes presionar para firmar rápido.

Verifica los sitios web

  • Si una empresa opera en línea, revisa que su página web tenga certificados de seguridad (https://) y que sus datos coincidan con los de la financiera registrada en SIPRES.

Nuevas formas de fraude: ¡Cuidado con las “monta deudas”!

Además de la suplantación de identidad, han surgido nuevas amenazas como las aplicaciones conocidas como “monta deudas”. Recuerda que no todas las entidades financieras operan por medios digitales ni tienen aplicaciones móviles para ofrecer servicios.

Para evitar caer en este tipo de fraudes, la Condusef recomendó verificar que cualquier app financiera esté regulada y registrada antes de descargarla o proporcionar datos personales.

Los fraudes financieros están en aumento, y los suplantadores de identidad utilizan tácticas cada vez más sofisticadas para engañar a las personas. Antes de contratar un crédito o cualquier servicio financiero, infórmate, verifica y consulta fuentes oficiales.

Recuerda que ninguna institución financiera legítima pide dinero para prestar dinero. Si algo parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente sea una estafa. ¡No te arriesgues y protege tu dinero! 

eleconomista

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