Porque tras más de décadas de combate contra el crimen organizado, los cárteles siguen operando.
El expresidente Felipe Calderón lanzó una estrategia para acabar con el narcotráfico, una guerra frontal contra los criminales. Los resultados, sin embargo, no fueron los esperados; al contrario, la violencia subió de tono y desde entonces México no se ha recuperado.
Este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como un «garrotazo a lo tonto» el actuar de Calderón, pues está documentado que la violencia se disparó en su sexenio.
Felipe Calderón sí es culpable del aumento de la violencia y tenemos pruebas
«Calderón declaró la guerra, le pegó un garrotazo a lo tonto al avispero y nos metió en todo esto que estamos padeciendo todavía. No había ni siquiera un plan y en vez de atender las causas, quiso -de manera espectacular- resolver el problema solo con el uso de la fuerza», dijo López Obrador este viernes en su conferencia de prensa matutina.
La violencia no solo no se detuvo sino que fue creciendo, incluyendo los años del gobierno de Enrique Peña Nieto.
«No olvidemos que cuando (Calderón) declara la guerra a la delincuencia organizada va a Michoacán, en Apatzingán y va vestido de militar, se pone un chaleco —que hasta le quedaba grande, parecía el comandante Borolas— y ahí declara la guerra»«AMLO»
La Administración para el Control de Drogas (por sus siglas en inglés, DEA) informó que en 2006 había cuatro cárteles de relevancia en México (Los Arellano Félix, el Cártel de Sinaloa, el Cártel de Juárez y el Cártel del Golfo). Ahora, después de los sexenios de Calderón y Peña, se incrementaron a nueve derivado de las facciones y divisiones entre ellos.
1. CÁRTEL DE SINALOA
Se trata del cartel de las drogas más antiguo y poderoso en México. Los líderes de este cartel, cuyo más famoso rostro estuvo puesto en Joaquín Guzmán Loera, alias El Chapo, corrompieron con éxito a los funcionarios públicos dentro de México y en el extranjero para operar en unos 50 países, según la DEA.
Con raíces en el oeste de México, ha luchado brutalmente por mayor control de rutas a través de los estados fronterizos de Chihuahua y Baja California, con el objetivo de seguir siendo el cártel dominante en el país.
El Chapo, el mexicano que pasó de vender dulces a ser el capo más poderoso
El cartel sobrevivió al arresto de su multimillonario fundador El Chapo Guzmán en 2014. En su momento fue visto como una victoria para el gobierno de Enrique Peña Nieto, luego se dio a la fuga en julio de 2015 y volvió a caer en enero de 2016. Un año después fue extraditado a Estados Unidos, donde fue sentenciado a cadena perpetua.
Sin embargo, Ismael El Mayo Zambada asumió el liderazgo del grupo, aunque este cártel puede operar con un liderazgo más horizontal de lo que se creía, según la DEA.
2. CÁRTEL JALISCO NUEVA GENERACIÓN
Conocidos inicialmente como «Los Mata Zetas», este poderoso cártel hizo su aparición en 2011 y tiene su sede en Jalisco, con operaciones en el centro de México, incluidos los estados de Colima, Michoacán, Estado de México, Guerrero y Guanajuato.
El CJNG ha sido dirigido por muchos excolaboradores del Cártel de Sinaloa, como Ignacio Nacho Coronel, quien operaba su facción en Jalisco hasta que fue asesinado por las fuerzas de seguridad de México en julio de 2010.
‘El Mencho’, el policía michoacano que se convirtió en líder del narco
El Cártel Jalisco Nueva Generación había servido como grupo aliado del de Sinaloa, pero se separaron en 2013. Analistas y autoridades mexicanas sugieren la división entre el Cártel Sinaloa y el CJNG es uno de los muchos indicios de una fragmentación general de los grupos delictivos. Rubén Oseguera Cervantes, alias El Mencho, es uno de los fugitivos más buscados por la DEA, y es su actual líder.
El CJNG tiene operaciones en toda América, Asia y Europa. El grupo presuntamente es responsable de distribuir cocaína, metanfetamina y fentanilo.
3. LOS ZETAS
Este grupo originalmente estaba formado por exmiembros del grupos de élite del Ejército mexicano, quienes desertaron al Cártel del Golfo y se convirtieron en sus asesinos a sueldo, según informa la DEA.
La violencia de Los Zetas consiste en que su principal activo no es el contrabando de drogas sino la violencia. Han acumulado un poder significativo para llevar a cabo un modelo de negocio a través de los delitos, como el robo de combustible (huachicoleo), la extorsión, el tráfico de personas y el secuestro.
Los Zetas son más agresivos que otros cárteles y usan la intimidación como estrategia para mantener el control de los territorios, haciendo uso de las redes sociales y exhibiendo cuerpos o partes del cuerpo para enviar mensajes y asustar a las fuerzas de seguridad mexicanas.
En 2012 la Marina asesinó al fundador Heriberto Lazcano, luego en 2013 cayó Miguel Ángel Treviño, alias El Z-40 y en 2015 detuvieron a Omar Treviño, El Z-42. 4. CÁRTEL DE TIJUANA
Este grupo ha controlado el contrabando de drogas de Baja California al sur de California, en Estados Unidos, una ruta de mucha importancia en la región.
Miguel Ángel Félix Gallardo, un exoficial de policía de Sinaloa, creó una red que incluía a su familia, los Arellano Félix, y a otros líderes como El Chapo, Rafael Caro Quintero o Amado Carrillo Fuentes, quienes entre 1990 y los principios de los años 2000 fueron uno de los cárteles dominantes en México.
Los siete hermanos y cuatro hermanas de la familia Arellano Félix heredaron el control del cártel de su tío, Miguel Ángel, después de su arresto en 1989.
El Cártel Tijuana se dividió en dos facciones en competencia cuando Eduardo Teodoro García Simental, alías El Teorompió relaciones con Fernando Sánchez Arellano, alias El Ingeniero y sobrino de los hermanos Arellano Félix, quien se hizo cargo de la gestión del cártel.
El Teo formó otra facción, según los informes, y se alió con Cártel de Sinaloa, contribuyendo aún más a la escalada de violencia.
Tras el arresto de El Ingeniero en 2014, la madre de Sánchez Arellano, la señora Enedina Arellano Felix, quien asumía el rol de contadora, supuestamente se hizo cargo del cártel.
5. CÁRTEL DE JUÁREZ
Con sede en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, Chihuahua, este cártel controlaba el corredor de contrabando entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas,
en las décadas de 1980 y 1990 bajo el liderazgo de su fundador, Amado Carrillo Fuentes, quien murió en 1997 luego de una fallida cirugía plástica.
Luego, Vicente Carrillo Fuentes tomó el liderazgo de la organización hasta su arresto en 2014.
La rivalidad entre este cártel con el de Sinaloa hizo que la ciudad fronteriza de Juárez se tornara una de las más violentas en el mundo, cuyos picos más altos de crímenes fueron entre 2008 y 2012.
Tradicionalmente el Cártel de Juárez es, y ha sido, un importante traficante de marihuana y cocaína sudamericana, y ahora se ha vuelto activo en el cultivo de opio y la producción de heroína, según la DEA.
6. CÁRTEL DE LOS BELTRÁN LEYVA
Los hermanos Beltrán Leyva crearon vínculos estrechos con el entonces jefe del Cártel Sinaloa, Joaquín El Chapo Guzmán y su familia.
El arresto en enero de 2008 del capo Alfredo Beltrán Leyva, a través de la inteligencia presuntamente proporcionada por El Chapo, desencadenó la separación de los Beltrán Leyva de los de Sinaloa. Ambos cárteles del narco han sido rivales desde entonces.
En 2009 la Marina mató a Arturo Beltrán Leyva, en su departamento en Cuernavaca, Morelos.
Otros grupos han surgido desde 2010, como Guerreros Unidos y Los Rojos, entre al menos otros cinco con raíces en el Cártel de los Beltrán Leyva.
La DEA informa que ahora es un grupo de facciones que trabajan bajo el cobijo del nombre de los Beltrán Leyva y trafican principalmente marihuana, cocaína, heroína y metanfetamina. Los subgrupos dependen de alianzas con el Cártel Jalisco Nueva Generación, el cartel de Juárez y elementos de Los Zetas para trasladar drogas a través de la frontera. Tienen enlaces de distribución en las ciudades estadounidenses de Phoenix, Los Ángeles, Chicago y Atlanta. Dentro de
México siguen siendo influyentes en los estados de Morelos, Guerrero, Nayarit y Sinaloa.
7. CÁRTEL DEL GOLFO
El Cártel del Golfo, con sede en el noreste de México, específicamente en Matamoros, Tamaulipas, tiene una larga historia de dominio en términos de poder y ganancias, con el apogeo de su poder a principios de la década de los años 2000.
Sin embargo, los ejecutores del cartel se separaron para formar un grupo separado (Los Zetas) y se volvieron contra sus antiguos empleadores, participando en una competencia hiperviolenta por los territorios.
Según los informes, el Cártel del Golfo se ha dividido en varios competidores. Algunos analistas ya no lo consideran una entidad completa y sostienen que está tan fragmentado que las facciones de sus facciones originales están luchando.
Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del cártel, corrompió con éxito a las fuerzas militares mexicanas de élite para convertirse en sus asesinos a sueldo. Aquellos militares corruptos se convirtieron posteriormente en Los Zetas, dice la DEA.
El Cártel del Golfo hoy concentra el comercio de cocaína y marihuana, pero recientemente se han expandido al tráfico de heroína y metanfetamina.
LA FAMILIA MICHOACANA
Este cártel anunció su intención de operar independientemente de Los Zetas en 2006. De 2006 a 2010, La Familia Michoacana adquirió notoriedad por su uso de violencia extrema, simbólica y tácticas militares extraídas de los Zetas.
Los miembros de La Familia en esos años de mayor actividad hicieron donaciones de alimentos, atención médica, escuelas y otros servicios sociales para beneficiar a los pobres en las comunidades rurales.
Ojo, aunque «oficialmente» se disolvió, este cártel sigue en funcionamiento, incluso después de la detención del líder en 2011, José de Jesús Méndez Vargas, alias El Chango.
Aunque en gran parte fragmentadas, las células restantes todavía están activas en tráfico de drogas, secuestro y extorsión en Guerrero y el Estado de México, especialmente en suburbios de clase trabajadora alrededor de la Ciudad de México. Los reportes de la DEA informan que Los Caballeros Templarios desplazaron a La Familia del estado de Michoacán. Sin embargo, una nueva célula llamada La Nueva Familia Michoacana tiene presencia en ese estado y en Guerrero, según reportes de esa agencia estadounidense.
LOS CABALLEROS TEMPLARIOS
Los Caballeros Templarios son un grupo que surgió de La Familia Michoacana, anunciando su presencia en Michoacán en 2011. Similar a La Familia, los Caballeros Templarios empezaron como un grupo de vigilantes, alegando proteger a los residentes de Michoacán de otros grupos criminales como los Zetas. Sin embargo, en los hechos se trataba de un cártel.
Este grupo es conocidos por el tráfico y la fabricación de metanfetamina, pero la organización también mueve cocaína y marihuana al norte.
Los Caballeros Templarios también tienen actividades ilícitas de extracción de mineral de hierro de minas explotadas. Hasta mediados de 2014 habían estado utilizando el puerto más grande de México, Lázaro Cárdenas, ubicado en el extremo sur de Michoacán, para contrabandear mineral de hierro extraído ilegalmente, entre otros bienes ilícitos.
En febrero de 2015, el líder de los Caballeros Templarios, Servando La Tuta Gómez fue capturado. El exmaestro de escuela primaria había tomado riesgos al ser entrevistado en los medios de comunicación. Con el arresto de La Tuta, la fortuna de los Caballeros Templarios se desplomó. Sin embargo, grupos derivados o fragmentos de otros carteles llenaron el vacío, incluido el surgimiento de tales grupos como Los Viagras.
ALD/Nacion321