Un patólogo forense contratado por el hermano de Jeffrey Epstein afirmó este miércoles que la evidencia sugiere que el magnate, acusado de tráfico sexual, no se suicidó en su celda en Nueva York, sino que pudo haber sido estrangulado.
Las autoridades, incluido el médico forense de la ciudad de Nueva York, concluyeron en agosto pasado que la muerte de Epstein, un famoso hombre de negocios bien relacionado que estaba en espera de juicio por cargos de tráfico sexual en una cárcel de Nueva York, fue causada por ahorcamiento en su celda.
Pero el patólogo Michael Baden, exjefe de forenses de la ciudad de Nueva York, dijo en un programa de televisión de la Fox recogida en diversos medios locales que Epstein experimentó una serie de lesiones que “son extremadamente inusuales en las ejecuciones suicidas y podrían ocurrir mucho más comúnmente en un estrangulamiento homicida”.
“Creo que la evidencia apunta al homicidio en lugar del suicidio”, dijo el doctor Baden, quien analizó la autopsia que fue realizada por funcionarios de la ciudad.
“Al hermano le preocupa que si (Epstein) fue asesinado, entonces otras personas que tienen información podrían estar en riesgo”, insistió Baden, quien llegó a sugerir posibles presiones de personas poderosas.
Baden dijo que había signos de actividad “inusual” “desde el primer día” de la autopsia, porque las heridas eran “más consistentes ligadas a un estrangulamiento homicida”.
El forense notó hasta tres huesos fracturados en la tiroides de Jeffrey Epstein. “Colgar no causa estos huesos rotos y el homicidio sí”, insistió el médico.
Epstein, fallecido en agosto a los 66 años de edad, era un rico financiero y un delincuente sexual ya condenado previamente.
El magnate utilizó su dinero y sus conexiones para obtener un acuerdo de declaración de culpa ampliamente criticado en un caso en Florida en 2008 puesto que quedó entonces en libertad para luego poder reincidir.
ALD/Noticiassin