El gobierno de Estados Unidos a través de su Departamento de Estado rechazó este jueves de forma contundente las acusaciones que la fiscalía nicaragüense le imputa a la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH), por el delito de supuesto lavado de dinero.
Antilavadodedinero / vostv
«Como parte de nuestra supervisión regular, USAID ha realizado varias auditorías de nuestro programa con la Fundación Violeta Barrios de Chamorro. No hemos encontrado evidencia de lavado de dinero o instancia en la cual la Fundación desvió fondos de USAID para otros propósitos», respondió el portavoz del Departamento de Estado a La Voz de América y 100% Noticias a través de una comunicación al ser cuestionado sobre el tema.
La respuesta del Departamento del Tesoro norteamericano se da cuando desde la semana pasada a la fecha, han sido llamados a declarar en calidad de “testigos” ante la Fiscalía más de una decena de periodistas y dueños de medios de comunicación que en los últimos años han mantenido vínculos con la FVBCH.
«USAID mantiene su compromiso de apoyar a los medios independientes en Nicaragua en sus esfuerzos por mantener informes de noticias precisos en condiciones adversas. Al igual que con todas las agencias gubernamentales de los Estados Unidos, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) realiza una supervisión constante para garantizar los más altos estándares de responsabilidad en todas sus actividades», dijo el funcionario estadounidense.
El portavoz aseguró que «el Gobierno de los Estados Unidos sigue con gran preocupación las alegaciones contra la Fundación Violeta B. de Chamorro, en particular las que se refieren a actividades financiadas por USAID».
Agregó que «las acciones contra Cristiana Chamorro y la Fundación, así como las detenciones de periodistas» son pasos alarmantes contra la democracia en Nicaragua y que “las elecciones libres y justas se ven socavadas cuando los medios independientes están bajo asedio y los líderes de la oposición no pueden competir en esas elecciones”.
Asimismo, EE.UU. instó al Gobierno a cesar «su represión y permita a los nicaragüenses ejercer sus derechos de reunión pacífica y libertad de expresión” y advirtió que “Estados Unidos continuará utilizando las herramientas diplomáticas y económicas a nuestra disposición para apoyar los llamados de los nicaragüenses a una mayor libertad, responsabilidad y elecciones libres y justas».