EE.UU. ordenó a China que cierre su consulado en Houston, lo que llevó a Beijing a insistir en contramedidas firmes a menos que Washington revierta inmediatamente su decisión.
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La medida es una escalada de tensiones políticas entre las dos economías más grandes del mundo.
El portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus, dijo que la directiva para cerrar el consulado general de China Houston se hizo para proteger la propiedad intelectual estadounidense y la información privada de sus ciudadanos.
La Convención de Viena dice que los diplomáticos deben “respetar las leyes y regulaciones del Estado receptor” y “tener el deber de no interferir en los asuntos internos de ese Estado”, continuó Ortagus.
Agregó que Washington no toleraría las violaciones de la República Popular de China de la soberanía de los Estados Unidos y la intimidación de nuestro pueblo, al igual que no hemos tolerado las prácticas comerciales injustas de la RPC, el robo de empleos estadounidenses y otros comportamientos atroces.
China condenó la decisión, advirtiendo de contramedidas firmes si Estados Unidos no rescinde urgentemente la orden.
“El cierre unilateral del consulado general de China en Houston en un corto período de tiempo es una escalada sin precedentes de sus acciones recientes contra China”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin, en una conferencia de prensa diaria,
Washington le ha dado a China tres días para cerrar el consulado en la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
Junto con la embajada en Beijing, Estados Unidos tiene cinco consulados en China continental, según su sitio web, en Chengdu, Guangzhou, Shanghai, Shenyang y Wuhan, donde comenzó la pandemia de coronavirus. Un posible cierre del consulado de Wuhan podría complicar los esfuerzos para compartir información sobre el virus.