El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que trabajaba con el Gobierno de México para identificar las “herramientas apropiadas” para ayudarlo a abordar las amenazas que plantean los cárteles de las drogas, días después de que el presidente Donald Trump dijo que quería incluirlos en una lista de grupos terroristas
Por Reuters/ALD
El anuncio de Trump de la semana pasada alarmó a México, que lo rechazó como “intervencionista”. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo, por ejemplo, que su país no permitirá otra operación desde Estados Unidos como “Rápido y Furioso” para el rastreo de armas.
La designación de grupos como organizaciones terroristas extranjeras apunta a sus finanzas mediante la imposición de sanciones estadounidenses, incluyendo el congelamiento de activos y prohibiciones de viajes, a ellos y las personas que los respaldan.
Hablando con periodistas, Hugo Rodríguez, subsecretario adjunto de Estado para América Central, no entregó detalles sobre los próximos pasos, pero dijo que las agencias estadounidenses han estado analizando este problema por meses.
“Lo que buscamos hacer es poner al servicio del Gobierno de México todas y cada una de las herramientas que tenemos a nuestra disposición para cooperar con el desafío de seguridad compartida que plantean las organizaciones de narcotráfico”, dijo.
“Tenemos que trabajar con ellos (México) para encontrar las herramientas que van a ser apropiadas en el contexto”, agregó Rodriguez. “Si tenemos herramientas a nuestra disposición que podemos usar que ayuden a abordar el desafío de las organizaciones de narcotráfico, lo estamos analizando”.
Trump ha ofrecido reiteradas veces ayuda militar en la lucha contra los cárteles de la droga, lo que López Obrador siempre ha rechazado, incluso después de la masacre de una familia mormona estadounidense-mexicana a inicios del mes pasado.