Ejecutivos del Banco de Irlanda (BOI) han optado por no testificar ante el Gobierno de Estados Unidos en los procesos penales relacionados con un esquema de lavado de dinero por valor de USD 400 millones a través de la estafa de criptomonedas OneCoin.
Sin testimonio de forma voluntaria
Tal como lo informó el medio de noticias enfocado en fintech FinanceFeed, el 11 de octubre, el gobierno de Estados Unidos había presentado una carta ante el tribunal el 10 de octubre, en la que aclaraba que durante la semana pasada había intentado obtener un testimonio voluntario de testigos en Irlanda. Sin embargo, los testigos cambiaron su postura respecto de testificar y ahora testificarían solo en respuesta al proceso obligatorio bajo el Tratado de Asistencia Legal Mutua de Estados Unidos e Irlanda (MLAT).
Los cuatro testigos en el BOI que se unirían a un juicio en el caso contra el acusado bajo custodia, Mark Scott, eran el jefe del equipo contra el lavado de dinero de BOI, Diane Sands, el miembro del equipo de inversión extranjera directa de BOI, Deirdre Ceannt, el ex vicepresidente ejecutivo y director de relaciones Derek Collins y Greg Begley.
Como el caso involucra a la Autoridad Central de Irlanda, el Gobierno presentó una solicitud de MLAT a las autoridades para convencer a los testigos de que testifiquen a través de un circuito cerrado de televisión.
Partes involucradas en el esquema criptopiramidal OneCoin
Así como informó Cointelegraph anteriormente, Scott es acusado de conspiración para cometer lavado de dinero. Del 2016 al 2018, Scott habría lavado casi USD 400 millones en ganancias de OneCoin a través de una serie de fondos de capital privado en las Islas Vírgenes Británicas con cuentas en bancos en las Islas Caimán, conocidos como Fenero Funds.
Scott también tenía cuentas bancarias corporativas en el BOI, a través de las cuales supuestamente lavó más de USD 300 millones en ganancias de fraude de OneCoin.
En marzo, un fiscal de distrito de Estados Unidos acusó a los fundadores de OneCoin, Konstantin Ignatov y su hermana Ruja Ignatova de «fraude electrónico, fraude de valores y delitos de lavado de dinero», en los que supuestamente atrajeron a los inversores a contribuir con «miles de millones de dólares en la fraudulenta criptomoneda».
ALD/.cointelegraph