Durante 2022, México registró un incremento del 140% en casos de fraude financiero, según datos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). El incremento experimentado fue consecuencia del aumento de los diferentes tipos de transacciones financieras, como envío de dinero o la compra de productos en internet.
La suplantación de identidad por email, estafas online y secuestro de datos han sido algunos de los crímenes más destacados en América Latina desde el inicio de la pandemia. Esto no solamente representa un alto riesgo para los clientes de comercios electrónicos, sino también para las entidades financieras y hasta Gobiernos.
Santiago Etchegoyen, CTO y cofundador de uFlow, comentó a NotiPress que el incremento de estos ciberdelitos se puede resolver con data analítica y modelos de Open Finance. Mientras más abiertos estén los datos por medio de modelos como Open Finance, más fácil será crear e identificar a partir de algoritmos los casos sospechosos de ciberfraudes financieros.
El fraude digital es algo evolutivo gracias a las nuevas formas de estafa que surgen diariamente. Así, los fraudes digitales ya existentes mutan para tratar de saltarse las trabas aplicadas desde las empresas de tecnología. Estos fraudes debenser analizados, estudiados y seguidos de cerca debido a la llegada de nuevas fuentes de datos, los cuales constituyen un nuevo problema, detalló el CTO.
Ante este contexto, uFlow creó un motor de decisiones, donde se puede verificar la identidad, historiales y comportamientos que descartan una infinidad de bots y estafadores que buscan crear fraudes. Tecnologías como el Big Data ayudan a detectar movimientos sospechosos y aplicar intervenciones específicas para evitar fraudes en los bancos digitales. La evolución constante de este tipo de delitos debería motivar a las empresas para aplicar múltiples capas de seguridad para la autenticación de los usuarios.
Etchegoyen señaló que el Open Finance es una oportunidad para mejorar y optimizar la lucha contra el fraude financiero, pues a partir de los principios de transparencia de información, diferentes entidades podrían compartirse los datos de los usuarios para evitar que se cometan este tipo de delitos. La tecnología y soluciones robustas de identificación y autenticación son una herramienta para mitigar de forma considerable las amenazas existentes en el mercado.
Solamente en el 2020, año en que las transacciones por internet aumentaron, se evidenció un incremento del 10.7% de fraude financiero en canales digitales, según la empresa. Lo anterior, provocó pérdidas cercanas a los 3 mil 500 billones de dólares, solo por internet, y más de 179.3 billones, por medio del celular.
Uno de los sectores que produce mayor cantidad de datos en tiempo real es el sector financiero. Las entidades deben sacar provecho de ello, pues su gestión adecuada les permitirá operar de una manera segura y mejorar la experiencia de los usuarios.