La periodista Patricia Cabezuelo, profesora y especializada en medios de comunicación social y la tecnología habla sobre las notificaciones falsas de comercios o de redes sociales, correos fraudulentos de bancos o promesas de lejanas y exóticas recompensas, la ciberestafa está de moda. Tan de moda que se ha multiplicado por trece en la última década.
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Los nuevos métodos han alcanzando un desarrollo espectacular suponiendo ya el 87,5% de todas las infracciones penales relacionadas con la cibercriminalidad y situándose la tasa del delito por cada mil habitantes en 5,6.
Si nos fijamos en dicha tasa encontramos que en Galicia es donde más estafas se produjeron el año pasado con 7,2 por cada mil vecinos, seguida de cerca por Madrid, con 7,0. La Comunitat Valenciana, con 4,8 se sitúa por debajo de la media nacional que queda fijada en el 5,6 aunque las cifras son mejores en Canarias (4,1), Andalucía (4,2), Extremadura (4,3) y Murcia (4,4).
En cuanto a la evolución, la autonomía que más ha visto crecer este tipo de delitos es el País Vasco donde se han multiplicado por 107 en la última década, al pasar de 141 en 2011 a 15.016 en 2021. El aumento también ha sido significativo en Cataluña donde se han registrado 47.314 estafas en 2021 frente a las 491 de 2011. En la Comunitat Valenciana se encuentra en una posición bastante buena aunque se han pasado de 2.451 a 24.428; es decir se ha multiplicado por 9,9
La principal recomendación por parte de las asociaciones de usuarios y fuerzas de seguridad es no introducir los datos bancarios en páginas que resulten sospechosas ya que una vez hecho esto es muy difícil recuperar el dinero perdido, no sólo por las dificultades de identificar al estafador que puede ubicarse en cualquier lugar del mundo sino también porque la mayoría de entidades bancarias no reembolsan las cantidades estafadas.
