En la primera parte de este informe, habíamos presentado a la que fue la más poderosa organización criminal irlandesa: los Kinahan, que hicieron de la Costa del Sol su casa. Introducían cocaína y heroína desde Latinoamérica a toda Europa, ayudados por sus buenas relaciones con otras mafias internacionales y mediante extorsión a los trabajadores de los puertos.
Antilavadodedinero / Elespanol
Eso no evitaba que tuviesen buena fama en el mundo del boxeo, donde fueron promotores de algunos de los combates más esperados. Todo cambió para ellos el pasado mes, cuando el Departamento del Tesoro de Estados Unidos los señaló como organización criminal y congeló todos sus activos en ese país. Para entonces, ya hacía 6 años que habían abandonado la provincia de Málaga, dejando tras de sí un rastro de sangre.
En 2008, el narco dublinés Paddy Doyle fue asesinado en Estepona; mismo destino que siguió Richard Keogh en Benalmádena en 2009 y Gerard Kavanagh en Marbella en 2014. En agosto de 2014, el excampeón europeo en la categoría de peso medio ligero Jamie Moore fue tiroteado en la pierna, también en Marbella.
La pieza cazada fue mayor todavía en 2015, cuando mataron en Mijas a Gary Hutch, amigo desde la infancia de Doyle y sobrino del capo Gerry Hutch, El Monje. Este asesinato provocó uno de los incidentes más recordados de esta serie de enfrentamientos: el asalto de tres hombres armados con fusiles Kalashnikov y presuntamente enviados por los Hutch en el hotel Regency de Dublín mientras se realizaba el pesaje por el título europeo de peso ligero. Intentaban asesinar a Daniel Kinahan, el capo de la banda rival, pero erraron en su objetivo y a quien se llevaron por delante fue a David Byrne, un soldado a las órdenes de los Kinahan. En total, la guerra abierta entre los Hutch y los Kinahan dejó un balance de al menos 20 asesinatos en Europa.
Hasta que estalló ese conflicto entre dos de las organizaciones más sangrientas de Europa, la sede principal del clan Kinahan estaba en la Costa del Sol. En 2010, Cristopher Kinahan y sus dos hijos fueron detenidos en el marco de la operación Shovel, un golpe policial que se fue desmoronando judicialmente con el paso de los años. El clan siguió viviendo en Málaga y el programa televisivo Equipo de Investigación les dedicó un programa en 2015. Decidieron abandonar Málaga en 2016 y pusieron a la venta su principal residencia en Estepona. Hoy se construyen nuevas viviendas sobre las ruinas inmobiliarias de su imperio.
Organigrama de los Kinahan.
El clan Kinahan, incluido su capo Daniel, vivía en Dubái desde entonces para blanquear tranquilamente su dinero al calor del golfo Pérsico. No obstante, desde que EE. UU. les señaló, hubo una reacción en cadena y también Emiratos Árabes Unidos ha congelado sus activos.
Por si fuera poco, el Departamento de Estado estadounidense ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por datos que ayuden a detener a Daniel, su padre Cristopher o su hermano Cristopher Jr. Las últimas informaciones señalan que el capo quiere huir de Dubái al mismo tiempo que seguir ocultando su dinero.
Sí se quedaron en la Costa del Sol dos viejos protagonistas de aquella guerra entre mafias irlandesas. Uno de ellos es Gerry Hutch, El Monje, el capo de la banda rival a los Kinahan, que fue detenido el pasado verano en Fuengirola cuando salía a cenar.
El otro sigue libre, aunque ha sido señalado directamente por Estados Unidos. Se trata de John Morrissey, presuntamente uno de los miembros más relevantes y sanguinarios del clan Kinahan. Los últimos informes señalan que su principal rol dentro de la organización era el de asesinar y estaría implicado en 38 muertes violentas; lo que contrastaría con el carácter extrovertido que mostraba en público.
Hasta que EE. UU. le señaló directamente como un pilar del clan Kinahan, había vivido abiertamente en Marbella, apareciendo en redes sociales y webs locales disfrutando una vida festiva y promocionando su propia marca de vodka. Ahora, su lujosa villa marbellí ha quedado vacía.