El comisionado Arles Miranda del Servicio de Protección Institucional (SPI) presentó una denuncia en perjuicio del subcomisionado Eric Espino ante la Fiscalía Anticorrupción por supuesto peculado.
Según Miranda, el denunciado salió de vacaciones por 45 días en un Toyota Fortuner del año, conductor, gasolina y Panapass sin autorización del comandante Heriberto Lorenzo.
El denunciante describe que se trata de un auto alquilado por la institución a una arrendadora en forma permanente a través del Ministerio de la Presidencia, que se paga a diario el alquiler, y representa una pérdida para el Estado puesto que se usó para asuntos personales.
Miranda también puso la denuncia ante la jefa de la Oficina de Responsabilidad Profesional del SPI, y otra ante la Contraloría para lo cual aportó fotografías y documentación en la que se aprecia el auto estacionado en un centro comercial en horas de la noche, mientras Espino paseaba con su familia.
Gustavo Pereira, abogado de Eric Espino, manifestó que se trata de una denuncia ‘temeraria’ y ‘no es verdad lo que se consigna’. Asegura que su cliente ha sustentado que fungía como jefe de la Guardia Presidencial y jefe de Operaciones del SPI. Funciones que, independientemente de que Espino se encontraba de vacaciones, tenía asignado el vehículo debido a que seguía haciendo reportes y coordinaciones.
La fiscalía ya solicitó la información a la guardia presidencial para que explique qué pasó con el auto, la gasolina y los recursos empleados en las vacaciones del mencionado.
La información sobre el vehículo en un centro comercial, de acuerdo al abogado, debe ser verificada por la Fiscalía. Las funciones de jefe de operaciones del SPI se circunscribe al movimiento, logística y avanzada que hace el Presidente, “obviamente que esto guarda relación con la seguridad nacional. Mi cliente se encarga de coordinar las unidades del SPI en varios sitios del país, que en caso de que se presente algún incidente él debe atenderlos”, justificó el jurista.
La Estrella