Anna Sorokin, la estafadora rusa que fingió ser la heredera de un magnate para engañar a toda la élite de New York, salió de prisión luego de casi tres años y medio.
AntilavadoDeDinero / infobae.com
Sorokin fue liberada el jueves de la Instalación Correccional Albion, ubicada en el norte del estado de Nueva York. Había sido sentenciada en mayo de 2019 a entre cuatro y 12 años de prisión por diseñar un plan en el que fingió ser una heredera alemana millonaria llamada Anna Delvey para, valiéndose de ese supuesto estatus, tomar dinero de bancos y otras instituciones financieras.
Su condena fue impartida por una corte de Manhattan, que la encontró culpable de ocho delitos de fraude perpetrados entre 2016 y 2017. Durante ese tiempo logró robar unos USD 275.000.
Además de purgar su condena, se le ordenó pagar unos USD 200.000 en concepto de restitución del fraude cometido y además unos USD 24.000 en multas.
Su sentencia incluía el tiempo que había pasado en la cárcel de Rikers Island antes de su juicio, la cual fue acortada por buen comportamiento. Sorokin fue puesta en libertad condicional por mérito, según los registros del Departamento de Correcciones. Esa condición legal se extenderá durante 10 años.
En diálogo con la agencia AFP, su abogada, Audrey Thomas, dijo que Soroking “ni siquiera puede abrir una cuenta bancaria sin permiso del comité de libertad condicional”. Thomas no quiso decir si Sorokin será deportada a Alemania, como prevé la ley ya que cuando fue condenada tenía una visa de turista expirada.
La joven estafadora creó una nueva cuenta de Twitter después de su liberación con el nombre de Anna Delvey. Ella tuiteó el comunicado de prensa del fiscal de distrito de Manhattan sobre su condena.
De acuerdo con Insider el mes pasado Sorokin había pagado una restitución a sus víctimas usando USD 320.000 que recibió de Netflix, que está produciendo una serie limitada sobre sus estafas.
Sorokin también está apelando los cargos en su contra a pesar de su liberación de prisión. Sus abogados dicen que el dinero que le debía a los bancos equivalía a una disputa civil y no alcanza el nivel de delito.
Ella quiere “limpiar su nombre y eso es importante”, dijo anteriormente la abogada de Sorokin, Audrey A. Thomas . “Es de su interés continuar con la apelación porque tiene toda su identidad en juego”.
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