El exministro de Transporte polaco Slawomir Nowak fue acusado este martes por la fiscalía de Varsovia de 17 delitos de corrupción, chantaje y tráfico de influencias y de dirigir un grupo criminal internacional.
Antilavadodedinero / Swissinfo
Nowak, de 47 años, formó parte del Gobierno dirigido por Donald Tusk entre 2011 y 2013 y fue detenido en julio de 2020 como resultado de una operación conjunta de agentes de la Oficina Anticorrupción polaca y la policía ucraniana.
Actualmente, Nowak se encuentra en libertad bajo fianza, tiene prohibido salir del país y se le han confiscado un coche de lujo y fondos en metálico por valor de más de un millón de euros.
Según la fiscal Aleksandra Skrzyniarz, el ex ministro encabezaba una red criminal internacional junto a otras 14 personas, también detenidas, tres de las cuales son de nacionalidad ucraniana y otro de ellos turco, y durante años ofrecieron y aceptaron sobornos en la adjudicación de contratos públicos en Ucrania, además de vender puestos de trabajo en empresas públicas polacas.
Según la investigación, Nowak y sus cómplices obtuvieron unas ganancias de varios millones de euros, así como obras de arte, vehículos de lujo y muebles.
Los delitos imputados al exministro fueron presuntamente cometidos entre 2016 y 2019, cuando ya no ostentaba ningún cargo político y pasó a trabajar para Ukrawtodor, la empresa pública ucraniana encargada de construir y mantener carreteras en ese país.
La fiscalía decidió agilizar las diligencias contra Nowak al detectar que éste pretendía obtener un certificado médico fraudulento del Instituto Médico Militar de Varsovia que le permitiese retrasar el proceso aduciendo enfermedad.
Según una información publicada hoy por el diario polaco Gazeta Wyborcza, las autoridades polacas espiaron las comunicaciones de Nowak durante meses utilizando el programa informático Pegasus, de fabricación israelí, lo que ha provocado las quejas de Plataforma Cívica, el partido político en el que militó Nowak.
En 2020, el alcalde de Varsovia, Rafal Trzaskowski, perteneciente a Plataforma Cívica, fue candidato en las elecciones presidenciales y contó con Nowak como asesor de su campaña.
De ser hallado culpable, el exministro se enfrentaría a hasta 15 años de prisión.
