El exfiscal general de los Estados Unidos durante la administración del expresidente republicano Donald Trump, William Barr, dijo que el ejército estadounidense debe usarse contra los cárteles mexicanos, que inundan el país con drogas como el fentanilo.
antilavadodedinero / neseseuro
Se trata de una propuesta de los representantes republicanos Dan Crenshaw de Texas y Michael Waltz del estado de Florida, que fue presentada en enero pasado y había pasado desapercibida, pero ha recuperado la atención debido al narcotráfico.
En su columna del jueves en el Wall Street Journal, Warr llamó a los cárteles “narcoterroristas” y los comparó con el grupo terrorista ISIS.
“Hoy el principal facilitador de los cárteles es el presidente Andrés Manuel López Obrador. En realidad, AMLO no está dispuesto a tomar medidas que desafíen seriamente a los cárteles. Los protege invocando constantemente la soberanía de México para evitar que Estados Unidos tome medidas efectivas”, agregó.
Indicó que casi todas las drogas ilegales que ingresan a EE.UU. son controladas por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Mencionó que las muertes por sobredosis superan cada año la cantidad de estadounidenses asesinados en el año más sangriento de la Segunda Guerra Mundial.—
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud (NIH), a partir de 2014, cada vez más adictos estadounidenses han comenzado a consumir fentanilo, ya que es 50 veces más potente que la morfina, fabricada en territorio mexicano con productos chinos, y por lo tanto más económica.
En este sentido, afirmó que se necesita un esfuerzo más agresivo dentro de México, incluida una presencia significativa de inteligencia y aplicación de la ley de los EE. UU., así como capacidades militares seleccionadas.
En tanto, el actual fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, dijo el pasado 2 de marzo en una conferencia de prensa ante el Senado de su país, que México podría hacer “mucho más” para combatir el tráfico de fentanilo que ha causado la muerte de más de 100 mil personas en territorio estadounidense.
“Nos están ayudando pero podrían hacer mucho más. No tengo ninguna duda al respecto”, dijo el titular del Departamento de Justicia.
“Los narcotraficantes que fabrican estas pastillas y las distribuyen a Estados Unidos son las personas más horribles que te puedas imaginar”, acusó.
