El ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, se declaró culpable ante un tribunal federal de Estados Unidos por el delito de conspiración para cometer lavado de dinero, informó la Fiscalía del Distrito Sur de Texas en un comunicado.
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Según dijo a la fiscal federal Jennifer B. Lowery, Yarrington admitió que aceptó más de 3.5 millones de dólares en dinero de sobornos ilegales y los utilizó para comprar fraudulentamente propiedades en Estados Unidos.
Yarrington admitió que recibió sobornos de personas y empresas privadas de México para hacer negocios en Tamaulipas mientras se desempeñaba como gobernador, de 1999 a 2004. También fue precandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia de México en 2005.
Según las investigaciones de la fiscalía, el ex gobernador hizo que sus prestanombres adquirieran propiedades en Estados Unidos para ocultar que era el dueño de las mismas y el dinero ilegal de los sobornos era utilizado para comprarlas.
Tomás Yarrington enfrentaba 11 cargos ante la justicia estadounidense, pero se desestimaron 10. Algunos de ellos eran por conspiración a la importación de cocaína y mariguana, conspiración por lavado de instrumentos monetarios, declaraciones falsas a instituciones bancarias y conspiración para cometer fraude bancario.
En 2012, un testigo protegido de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), lo acusó de lavar dinero para las organizaciones criminales de Cártel del Golfo y Los Zetas, de acuerdo con documentos de la justicia de Estados Unidos.
Seis años después, en 2018, Yarrington, fue extraditado a Estados Unidos desde Italia.
