Yao Qian, antiguo líder de la iniciativa de moneda digital del Banco Central de China (CBDC, por sus siglas en inglés), ha sido acusado de amplios sobornos mediante el uso de criptomoneda. Considerado en su día como uno de los defensores más abiertos de la tecnología blockchain en China, Yao es ahora objeto de duras críticas por abusar presuntamente de su cargo en beneficio propio.
El Gobierno chino le ha destituido de su cargo, le ha expulsado del Partido Comunista y ha remitido su asunto a las autoridades judiciales. Esto pone de manifiesto las crecientes dificultades para controlar esta industria en desarrollo, ya que constituye uno de los casos de corrupción relacionados con las monedas digitales más sonados del país.
Riesgos de corrupción en la integración y gobernanza de CBDC
Las acusaciones dirigidas contra Yao Qian se centran principalmente en el tiempo que prestó sus servicios a la Comisión Reguladora de Valores de China como Director del Departamento de Supervisión Tecnológica. Los investigadores afirman que realizó negocios ilegales con proveedores de servicios tecnológicos, aceptó regalos excesivos, planificó banquetes extravagantes y modificó las políticas de empleo en beneficio propio.
Estos cargos contrastan fuertemente con el pasado de Yao como pionero en la inclusión de activos digitales y tecnologías blockchain en el sistema financiero chino.
A medida que los países tratan de incluir los CBDC en sus sistemas financieros, este caso llama la atención sobre los peligros de la corrupción. Aunque los CBDC están pensados para mejorar la apertura y reducir las tasas de fraude, este caso señala las vulnerabilidades aún existentes, especialmente en relación con el abuso de poder de importantes funcionarios.
La caída en desgracia de Yao también plantea cuestiones sobre la eficacia de los actuales sistemas de control para reducir los delitos en la industria financiera digital.
Entre estos acontecimientos, la atención prestada a las ramificaciones más amplias de este caso ha despertado el interés internacional. La integridad de quienes supervisan estas redes adquiere mucha más importancia a medida que las monedas digitales se imponen en todo el mundo. Para China, esta controversia no sólo afecta a Yao Qian, sino también a la preservación de su liderazgo en innovación bancaria digital.
Además, CNF reveló anteriormente que las políticas criptoamigables del expresidente estadounidense Donald Trump habían llamado la atención de Xiao Feng, de HashKey. Feng cree que la postura proactiva de Trump podría obligar a China a cambiar su forma de tratar los activos digitales.
