Las autoridades filipinas anunciaron hoy que van a entregar a China al fugitivo Xie Haojie, un exoficial del gobierno chino acusado de crímenes económicos y corrupción, detenido el pasado domingo en su vivienda de Manila.
Xie, que se escondía en Filipinas desde marzo de 2018, está acusado en China de apropiarse de unos 210 millones de dólares (184 millones de euros) de las arcas públicas y aceptar sobornos en su puesto de director de una empresa estatal, explicó el comisionado de la Oficina de Inmigración filipina, Jaime Morente.
El fugitivo, de 49 años, fue presentado hoy ante los medios en una rueda de prensa en Manila con funcionarios de la Oficina de Migración y la Comisión Presidencia Anticrimen.
«No vamos a tolerar la presencia de extranjeros indeseables que usan Filipinas como escondite. Los fugitivos deben volver a sus países para enfrentar sus crímenes», señaló Morente.
Morente indicó que Xie será deportado a China tan pronto como la policía de ese país organice la logística para su entrega y que su nombre se incluirá en la lista negra para que no pueda regresar a Filipinas.
Desde Inmigración subrayaron que Filipinas seguirá colaborando estrechamente con China, gran aliado de la administración del presidente Rodrigo Duterte, para perseguir a los fugitivos de ese país.
La semana pasada, las autoridades migratorias filipinas también deportaron a Misao Kaminsukasu, el fugitivo japonés más buscado que se escondía en Filipinas desde octubre, acusado en Japón de fraude por estafar miles de millones de yenes a cientos de personas.
ALD/EFE