Luego de que en la última semana se conociera que el presidente Joe Biden tenía en al menos tres localidades distintos documentos de tiempos del gobierno de Barack Obama, el Departamento de Justicia creó una fiscalía especial, similar a la que investiga al expresidente Donald Trump por un caso similar.
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El fiscal general Merrick Garland anunció el nombramiento de un fiscal especial para analizar el descubrimiento de documentos clasificados en poder del presidente Joe Biden de sus tiempos como vicepresidente de Barack Obama.
El encargado de la investigación será Robert K. Hur, un ex fiscal federal de Maryland, quien trabajó en el Departamento de Justicia durante el gobierno de Donald Trump.
Garland destacó que el 5 de enero, el primer fiscal asignado para revisar el caso recomendó que se creara una fiscalía especial y afirmó que se examinará si “alguna persona o entidad violó la ley en relación con este asunto”.
El alto funcionario hizo el anuncio desde la sede del Departamento de Justicia este jueves, citando que la agencia de Archivos Nacionales (NARA) notificó al departamento del primer hallazgo ocurrido en noviembre pasado, cuando los abogados del presidente informaron a la Casa Blanca que habían encontrado documentos con marcas que determinaban que eran clasificados en una oficina que usó Biden al dejar la Casa Blanca.
Biden reconoce que tenía documentos clasificados en su poder
Este jueves, en una rueda de prensa, poco antes del anuncio de Garland, el presidente Biden reconoció que un documento con marcas de clasificado que datan de su época como vicepresidente fue encontrado en la “biblioteca personal” en su casa en Wilmington, Delaware, junto con otros documentos encontrados en su garaje días después de que se diera a conocer que hallaron información confidencial en la oficina de su antiguo instituto en Washington.
Biden dijo a los periodistas en la Casa Blanca que está “cooperando total y completamente” con la investigación del Departamento de Justicia sobre cómo se almacenó esa información clasificada, así como registros gubernamentales.
El mandatario afirmó que el Departamento de Justicia fue “notificado inmediatamente” después de que se localizaron los documentos y que los abogados del departamento asumieron la custodia de los registros. El primer lote de documentos había sido entregado a la Administración Nacional de Archivos y Registros.
