Un alto funcionario del gobierno y un empresario de Cabo Verde llegaron secretamente a Venezuela el lunes y pasaron la noche en el palacio presidencial de Miraflores en medio de los esfuerzos del gobernante Nicolás Maduro por conseguir que el país africano libere a su principal socio, el empresario colombiano Alex Saab, quien es solicitado por Estados Unidos por lavado de dinero.
antilavadodedinero / Elnuevoherald
Los hombres llegaron en un avión privado a través de la terminal presidencial, conocida en Venezuela como la “Rampa Cuatro”, con documentación que los identificaban como Carlos Jorge Oliveira Gomes Dos Anjos y Fernando Gil Alves Évora. Desde el aeropuerto internacional de Maiquetía, los individuos fueron trasladados hasta el palacio presidencial, dijeron las fuentes.
“Ellos durmieron en Miraflores, no fueron alojados en un hotel”, dijo una de las fuentes, que habló bajo condición de anonimato.
Aún cuando las conversaciones realizadas en el Palacio fueron sostenidas a puerta cerrada, las fuentes dijeron que estaban relacionadas con el forcejeo diplomático entre Caracas y Washington sobre la solicitud de extradición de Saab y que la reunión duró hasta altas horas de la noche.
En las conversaciones participaron Maduro y por video conferencia varias figuras del chavismo, incluyendo al ministro de Petróleo Tareck El Aissami y el ministro de Información Jorge Rodríguez.
Oliveira Gomes Dos Anjos fue nombrado en el 2017 como Director de Turismo y Transporte de Cabo Verde, nación que arrestó a Saab en junio y ahora procesa el pedido de extradición introducido por Estados Unidos.
Alves Évora, por su parte, es un prominente empresario del sector farmacéutico en la isla africana.
Los dos partieron de regreso desde Maiquetía el martes a las 3:08 p.m. rumbo a Lisboa, haciendo escala primero en San Vicente y Las Granadinas.
Y en lo que generaba aún más interrogantes, los visitantes llegaron a San Vicente con un mayor número de piezas de equipaje de las que tenían al partir rumbo a Venezuela, confirmaron las fuentes.
Personas que han seguido de cerca el caso de Saab, empresario colombiano descrito por la justicia estadounidense como el testaferro y principal socio de Maduro, dijeron que la misteriosa visita de los hombres de Cabo Verde deja un mal sabor en la boca.
Oliveira Gomes Dos Anjos y Alves Évora llegaron a Venezuela tras una larga travesía que comenzó el lunes 11:25 a.m. en Lisboa, donde los individuos tomaron un Gulfstream 5 privado, Siglas GES81M para llegar siete horas después a San Vicente y las Granadinas.
De allí, según los registros públicos de vuelo, tomaron otro avión, un Citation C550, siglas YV3344, que los llevó hasta el aeropuerto de Maiquetía. Aún cuando la travesía representó más de ocho horas de vuelo, los caboverdianos aterrizaron en Venezuela a las 3:51 p.m., debido a los diferentes horarios.
Para volar de regreso, los dos visitantes tomaron el Gulfstream 5 que el día anterior les había llevado hasta San Vicente.
Saab, arrestado en junio en Cabo Verde bajo pedido de Estados Unidos, es acusado de operar un sistema de corrupción y lavado que le había permitido transferir $350 millones fuera de Venezuela a cuentas en el extranjero. De ser hallado culpable, podría ser sentenciado hasta 20 años de prisión.
Pero las investigaciones apuntan a que Saab también es el arquitecto principal del entramado financiero que ha permitido al régimen de Maduro evadir las sanciones impuestas por Estados Unidos, siendo la persona enviada por Caracas para negociar el oro y el petróleo que Caracas exporta por debajo de la mesa.
El empresario había sido colocado previamente en la lista negra del Departamento del Tesoro por supuestamente participar en un mega esquema de corrupción en sociedad con la familia de Maduro, que malversó cientos de millones de dólares del pueblo venezolano.
Las autoridades de Estados Unidos también investigan los vínculos de Saab con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), bajo sospecha de que él se desempeñó como tesorero de la organización narcoterrorista.